Author: gabtorar
•12:07
Nehemías 1:11: “Te ruego, oh Jehová, esté ahora atento tu oído a la oración de tu siervo, y a la oración de tus siervos, quienes desean reverenciar tu nombre; concede ahora buen éxito a tu siervo, y dale gracia delante de aquel varón. Porque yo servía de copero al rey”.

En el común de las personas existe una presión por el éxito. Vivimos en una sociedad exitista en que todo se mide en términos del éxito que tengamos en lo que hacemos.

Pero ¿Cómo definimos “éxito”?

El concepto varía entre una persona y otra.

Normalmente va asociado a la consecución de metas o ciertos objetivos propuestos con anticipación.

Muchas personas tienen sus propios parámetros con los que miden a aquellos a quienes consideran exitosos.

¿Cuáles son esos parámetros?

Bien, para la persona promedio el éxito se mide por tener una buena casa. Vivir en un buen barrio. Tener un buen trabajo. Contar un salario alto. Tener a los hijos en algún buen colegio pagado. Contar con la última tecnología a disposición. Tener un auto del año… normalmente el éxito es medido con la vara del poder adquisitivo que las personas poseen.

Hay que decir que las cosas anteriormente mencionadas no son malas EN SI MISMAS pero se vuelve un problema cuando EL ÉXITO se MIDE en función de estas cosas.

No es raro encontrarse con personas que NO hablarán contigo de su progreso personal o espiritual (no tienen mucho que decir al respecto) ni de lo bien que van sus relaciones familiares, SINO de los logros materiales que han conseguido.

Esa mentalidad es absolutamente terrenal. Pero con qué fuerza ha entrado en muchos cristianos.

Las personas que han abierto la puerta a tales ideas están siendo extraviadas de la más gravitante verdad con la que uno debería medir el éxito:

“Uno es exitoso en la medida en que deja a Dios hacer SU voluntad EN y A TRAVÉS de su vida”.

NO es juicioso, entonces, medir el éxito por los logros materiales, o por logros cuantitativos, o por avanzar rápido en la vida. El verdadero éxito SÓLO se puede medir por haber hecho lo que sabíamos ERA la voluntad de Dios.

Y es una medida personal.

Las personas tienden a medir su éxito en relación con otr0s, pero la verdad es que uno sólo puede ser exitoso en relación con uno mismo.

Esto porque Dios no es injusto. Él no nos va a medir por otros. Él nos va a medir de acuerdo a nuestras capacidades, no a las de los demás.

Dios no nos va a pedir cuentas por lo que NO nos dio, sino por aquello que puso en nuestras manos.

A veces nos detenemos de avanzar hacia lo que Dios planeó porque estamos esperando tener el equipamiento que tiene “otro”.

Eso está tan fuera de lugar como QUERER OBTENER los resultados de otros.

Dios ha dado A CADA uno lo suyo. Es POR ELLO que Dios nos hace responsables por lo que NOS HA DADO.

Creo que los ejemplos son buenos para aclarar los puntos que uno intenta presentar.

Por ejemplo, usando una pala, no podrás cavar el mismo hoyo que un hombre cava con una retroexcavadora.

Y aunque Dios creó ambas cosas y ambas personas, Él dio a cada uno la sensibilidad para trabajar con cada herramienta.

Ambos, hombres y herramientas, cumplen un propósito único en Dios.

Dios requiere de gente que cave hoyos de precisión y poco profundos y asimismo necesita que otros caven fosas de varios metros de profundidad.

El hombre de la retro será tan útil como el de la pala. Aunque obviamente será más notorio que el otro.

Es0 no niega que ambos son significativamente importantes EN EL PROPÓSITO DE DIOS.

El asunto de fondo y que a la postre medirá el verdadero éxito es si cada uno será fiel en aquello que Dios le haya encargado.

Yo pastoreo una pequeña congregación y no necesito tener una iglesia multitudinaria pero si Dios desea ponerme frente a una, no tengo porqué evitarlo.

Seré tan útil, en uno como en otro sitio, en la medida en que sea fiel a Él y a lo que Él ordenó.

Esto nos debe llevar a pensar: ¿Estamos contentos con lo que tenemos del Señor? ¿O lo consideramos insuficiente?

El éxito en Dios se mide por la fidelidad con que nos manejamos en las pequeñas cosas. Eso fundamental.

Nehemías fue fiel como copero del rey Artajerjes.

Recibió una visión del Dios y pidió ayuda del Señor para poder llevarla a cabo.

¡¡Él pidió tener éxito en los términos correctos!!

Fue fiel como líder y administrador en el pueblo de Dios.

El propósito de Dios se cumplió en manos de Nehemías, por lo que lo podemos considerar un hombre muy exitoso.

Quizás tú deseabas una planta o flor y Dios te dio un arbolito.

Se fiel con el arbolito que Dios te entregó. Abónalo, cuídalo, riégalo. Y aunque tal vez nunca llegues a tener la planta que deseabas, si eres fiel con ese arbolito, serás una persona muy exitosa.
Author: gabtorar
•13:41
Gálatas 3:1: ¡Oh gálatas insensatos! ¿Quién os fascinó para no obedecer a la verdad, a vosotros ante cuyos ojos Jesucristo fue ya presentado claramente entre vosotros como crucificado?

En la vida contemporánea existen tantas cosas sorprendentes que pueden acabar fascinando al cristiano.

La escritura nos advierte sobre ese peligro en este versículo.

Pablo descubre que los hermanos de Galacia están siendo extraviados del camino de la verdad, y sabe que esto es el resultado de una fascinación.

La palabra fascinar significa “atraer o impresionar mucho una persona o cosa a alguien”.

Si somos honestos reconoceremos que es muy posible sentirse fascinados por algo o alguien, en la época que vivimos.

Los mismos logros de la ciencia tienen fascinadas a tantas personas alrededor del mundo.

Si no somos cuidadosos, aquellas cosas que debieran ser para nuestro servicio y utilidad bien pueden terminar dominándonos, fascinándonos.

Conozco tantos casos de maravillosas personas algún día siguieron y sirvieron a Dios con alegría, y que hoy ya no tienen tiempo para Dios, porque se fascinaron con cosas, como video juegos, por ejemplo.

Este mismo medio (internet), si uno no es cuidadoso, puede llegar a fascinarse al punto de dejar muchas responsabilidades sin hacer por pasársela conectados.

Pero el riesgo no está solo en las cosas. Hay también personas con tal carisma que fascinan a multitudes.

Son miles las personas que siguen líderes, religiones, filosofías y toda clase de creencias, que son dañinas para ellos mismos, pero no logran ver la realidad, porque están fascinados por el carisma de sus líderes, por ejemplo.

La gran crisis valórica y moral ha sentado las bases para que millones de personas vivan en una suerte de extravío.

Es una gran verdad que aunque muchos intentan demostrar que tienen claro el rumbo a seguir, por dentro, sienten una gran desesperación por lograr encajar con alguien que les sirva de guía. Alguien que les proporcione algún modelo para imitar, alguna forma de vida, estilo, moda que emular.

Los medios de comunicación en general, y en particular la televisión, son los grandes responsables de levantar ídolos, de convertir personas en personalidades que cautiven a grandes y pequeños.

Hemos vivido por tanto tiempo con eso que nos parece normal pero… ¿lo es realmente?

Hablo de hombres a los que convierten en superhombres, personajes que idealizados llegan a ser o representar todo lo que uno (por dentro) desearía ser.

El mundo es fácilmente fascinado por estos “personajes”, y digo “personajes” porque eso es lo que son, una invención, un producto televisivo nada más.

Todos esos supuestos héroes son tan débiles como somos los demás. Tienen tantos miedos como podemos tener los demás. Se sienten tan impotentes como llegamos a sentirnos los demás, sólo que a ellos, se les ha escogido para parecer invencibles, muy seguros de lo donde ir y de cómo llegar allá.

He oído decir que en el reino de los ciegos el tuerto es rey, y creo que ese popular adagio, sin pretender discriminar, se refiere a esto.

No es raro, en todo caso, que habiendo tal crisis valórica y de reales y consistentes de modelos de vida verdadera a seguir, las personas se conformen e incluso entusiasmen con la idea de seguir al menos una ilusión.

Los paparazzi hacen lo suyo cuando logran fotografiar a alguna de estas bellas celebridades (de la pantalla) en la vida real. Me refiero sin el maquillaje, sin los arreglos que la industria del cine logra. ¡¡Cómo sorprende darse cuenta que hasta su belleza es arreglada!!

Lo cierto es que hay peligros en dejarse llevar por cualquier forma de fascinación.

Hoy más que nunca necesitamos abrazarnos del ancla segura que Cristo representa para nosotros los mortales.

Su vida de desprecio, su cruz ensangrentada, sin maquillajes son el mejor retrato de lo que yo entiendo debiera ser un verdadero superhéroe.

En lo que a mí respecta, no me avergüenza decir que “Cristo, (como dice una canción de niños a mi pequeña de 2 añitos le gusta cantar) es mi superhéroe, mi amigo, el mejor”.

Si hemos de ser fascinados por alguien, que sea por el Señor.

Lo que es yo, estoy fascinado con el Señor ¿y tú?
Author: gabtorar
•12:23
Lucas 10:26: Él le dijo: ¿Qué está escrito en la ley? ¿Cómo LEES?

Que el Señor haga cosas que a uno lo sorprenden, no debe extrañarnos.

Que Él salga de pronto con cosas que uno ni siquiera imaginaba es parte de su peculiar manera de Ser y Hacer.

Pero hace un par de meses Dios me dijo algo que realmente me hizo pensar.

Para que se entienda mejor, yo llevo varios años en lo que definiría como un caminar serio con Cristo.

Mi caminar con seguridad no ha sido perfecto, pero ganas de alcanzar esa perfección que es posible alcanzar en Cristo no me han faltado nunca, desde que transito por este camino.

He deseado con todo el corazón vivir una vida que sea consecuente con la clase de vida que Cristo desea.

He intentado poner por obra cada cosa que Dios me ha enseñado y he reñido conmigo mismo en innumerables ocasiones con tal de hacer morir lo mío para que prevalezca lo de Cristo.

No obstante lo anterior, el Señor me dejó estupefacto cuando me indicó que yo debía aprender a leer su palabra.

¡¡Imagínate!! ¿Qué me estaba tratando de decir el Señor?

He aprendido que Dios es muy práctico (aunque nosotros lo hacemos muy complicado) y simplemente Él me estaba diciendo lo que yo acababa de decir oír. Que debía APRENDER A LEER SU PALABRA.

Tal vez Dios tenga problemas con otras personas porque NO LEEN SU PALABRA, pero ese no era mi problema.

Mi problema es que yo LEIA PERO NO COMO DEBIA.

EL Señor me hizo ver que muchas de las respuestas que uno busca han estado ahí DELANTE de uno, EN LA PALABRA DE DIOS.

Aunque no todo lo que pasa es culpa del diablo, es preciso reconocer que su trabajo se centra fundamentalmente en tratar de nublarnos el entendimiento para que no veamos lo que Dos nos está tratando de mostrar.

Las personas que tienen problemas a la vista entienden muy bien lo que digo. Cuando la visión se nubla, uno se vuelve incapaz de leer los anuncios, por ejemplo, o los nombres o números de los microbuses.

El trabajo del diablo es producir esta especie “de nubosidad” en nuestra visión.

En lo práctico, uno muchas veces lee lo que dice la biblia pero entiende otra cosa, algo distinto de lo que esta dice, y eso lo vuelve de tan poco valor, que es casi igual que si uno no lo hubiera leído.

Quiero citar un ejemplo que creo será bien representativo de lo que acabo de mencionar.

Cuando uno lee en Romanos 8:37: “Antes, en todas estas cosas SOMOS más que vencedores por medio de Aquel que nos amó”. ¿Qué entiende?

El promedio de las personas pondrá el énfasis en aquello que es correcto y medular: “somos más que vencedores”.

Pero no llegarán a entender esto del modo debido, porque después de leerlo mirarán sus circunstancias y dirán: “bueno, eso tal vez sea cierto para otro, pero no para mí”.

Lo siguiente es que esperará que su realidad (las condiciones de su vida) cambie para SENTIRSE más que vencedor.

Sin embargo, la palabra de Dios ya nos había dejado claro que nuestra victoria “ES” (en tiempo presente) en las actuales circunstancias.

La mala interpretación de este verso nos llevará a perdernos lo más importante de esta aseveración: “que Dios YA nos dio victoria”.

No hará que perdamos la perspectiva de que esa victoria no está sujeta a lo que vemos o vivimos sino a lo que Cristo ha hecho y establecido para nosotros.

Las personas no entenderán que Su victoria no está por venir, sino que YA HA LLEGADO y esto será equivalente a tener ¡¡gente victoriosa viviendo como perdedores!!

¡¡Los ejemplos a señalar son tantos!! Y esto atraviesa y condiciona la manera en que podemos ver, entender y relacionarnos con Dios.

El enemigo saca mucha ventaja cuando, usando sus mentiras, logra convencernos de no creer a las verdades de Dios.

Así, estimados lectores, debo decir que leer es una cosa importante, pero entender lo que leemos, lo es mucho más.
Author: gabtorar
•12:22
Deuteronomio 29:29: “las cosas secretas pertenecen a Jehová nuestro Dios; mas las reveladas son para nosotros y para nuestros hijos para siempre, para que cumplamos todas las palabras de esta ley”.

He estado compartiendo en la congregación que tener un carácter práctico es muy importante.

Es fundamental que internalicemos que aquellas cosas que Dios nos ha enseñado son para nuestro pr0vecho.

Dios no solo quiere que sepamos. El conocimiento debe tener una aplicación práctica.

Los principios bíblicos en cualquier área, llegan a ser útiles únicamente cuando los ponemos por obra.

Los cristianos no llegamos a sacarle todo el partido que podemos a las oportunidades que Dios nos da al hacernos partícipes de sus verdades Eternas.

Existe lo que yo llamo “saberes muertos”. Me refiero a esos conocimientos que no tienen gran valor porque no tienen aplicación. Son como una moneda que está fuera de circulación. Puede estar en nuestro bolsillo, pero no vale nada.

El solo hecho de saber lo que Dios dice o piensa sobre cualquier asunto EN SI NO AYUDA, NO RESUELVE LOS CONFLICTOS.

Ese conocimiento debe llegar a regir mi vida. Debo llegar a vivir por esa verdad que Dios me ha enseñado, porque es entonces cuando obtenemos resultados.

¿Quién puede negar que Dios tiene un plan maestro?

Todo lo que Él hace funciona, pero hay que seguir el manual (las instrucciones de Su palabra) para lograr los resultados.

De seguro has comprado algún artículo que no resultó funcionar como esperabas.

Luego de llevarlo al sitio de asistencia te dijeron que no había ningún problema con dicho artículo, que el problema se suscitó en la forma de usarlo.

Muy comúnmente me encuentro con personas que me dicen “lo sé”, o “lo sabía”, pero no han hecho de acuerdo a lo que sabían.

Lo siguiente que puedes esperar, es que vivan las consecuencias de su inconsecuencia, es decir, haber sabido y no haber obedecido.

La iglesia como tal no salva. Es el lugar diseñado para los salvos, pero ella no salva por sí misma.

Muchos creen que estando DENTRO de la iglesia están seguros pero no es así.

La seguridad viene de estar EN CRISTO y estar en Cristo es VIVIR POR SU palabra.

Toda revelación de Dios SIEMPRE tiene como finalidad llevarnos a Él, a obedecerle.

El Señor no ha dejado NADA al azar. El planifica las cosas de modo perfecto, pero llegar al final del propósit0 divino dependerá no solo de Dios sino principalmente de nosotros.

Las elecciones que hacemos serán determinantes en nuestro destino final.

Cada día, en cada cosa que escogemos estamos determinando donde llegaremos un día.

Por eso es tan importante que nos movamos de acuerdo a la dirección que recibimos del Señor, a lo que ya sabemos.

Si Él dice algo y nos mueve en alguna dirección, debemos permitir que esa visión se vuelva medular en nuestro andar, y que las decisiones que tomemos estén en línea con esa visión.

Colaboramos con Dios cuando nos movemos en la dirección que Él nos está señalando.

Mis relaciones, mi vida espiritual, mi situación financiera, TODO se verá beneficiado si me muevo por lo que ya se.

Es esencial que hagamos lo que sabemos, solo eso asegurará un caminar exitoso en Dios.
Author: gabtorar
•12:21
Santiago 4:7 “Someteos pues a Dios, resistid al diablo, y huirá de vosotros”.

Este es un mandato del Señor para la iglesia, en primer lugar, pero útil para todos los que estén dispuestos a ponerlo por obra.

La idea del Señor es que por medio de la observancia (entiéndase “obediencia”) a Sus preceptos, nosotros podamos tener victoria sobre el enemigo.

El diablo es el enemigo declarado del cristiano ¿Lo sabías?

Puede parecer extraño que haga esta pregunta pero para muchos es bastante pertinente. Cientos de miles de personas NO CREEN en el diablo.

Ellos no creen en la existencia de un ser malvado que pueda estar dispuesto a hacer añicos a la humanidad, solo por ser la creación de Dios.

Para muchas personas la maldad simplemente no existe.

No sé cómo tales personas explicarán las maldades que se suceden a diario, pero no lo atribuyen a un personaje malévolo que actúa así porque esa naturaleza está y opera en él.

Para quienes no lo saben, la palabra diablo significa “acusador, calumniador”, pero ese no es el único nombre con el que se le describe en la biblia. También se le llama Satanás, que significa “enemigo o adversario”.

Los cristianos, especialmente, los que estamos más familiarizados con la palabra de Dios y sus enseñanzas, hemos experimentado en carne propia la maldad de este implacable adversario.

Cuando uno encara sus maquinaciones se da cuenta de lo indispensable que resulta tener un plan de contingencia para hacerle frente y encarar sus ataques.

Como siempre, Dios en Su palabra, nos provee de dicha ayuda.

Hay tres ideas claras que se desprenden del verso anterior. Estas son: “someteos, resistid y huirá”

Hay cantidad de cosas en las que el orden de los factores NO ALTERA EL PRODUCTO, pero hay otras en que el resultado NO ES EL MISMO si no se sigue al pie de la letra. Este parece ser uno de esos casos.

Todas las aflicciones que el diablo trata de infligir a la humanidad son en venganza contra Dios.

El plan inicial del diablo fue llegar al trono de Dios. Más exactamente, su idea incluía sentarse en ese trono, llegar a ser Dios. Recibir la adoración que le pertenece a Dios.

El Señor lo puso rápidamente en su lugar y desde entonces, sabiendo que Dios es intocable, su plan ha consistido en tratar de llegar a Dios por medio de sus hijos.

Dios es poderoso. En realidad es TODOPODEROSO, y el enemigo sabe que no tiene opción contra Él, pero sabe asimismo que Sus hijos no son igual que el Padre.

En un cobarde acto de maldad el diablo la emprendió contra la humanidad que Dios creó y eso marcó el comienzo del conflicto.

Hay millones de personas que no muestran el más mínimo interés o cuidado por Dios, Su voluntad o por Su palabra.

Pero, del mismo modo, hay otro muchos millones que LE siguen, aman y desean Su voluntad.

Aprovechándose de las debilidades de una humanidad que vive sin Dios Satanás ataca y destruye el alma de las personas usando tentaciones.

Nuestra seguridad contra los ataques de este adversario se encuentra en el sometimiento a la palabra de Dios. Cuando nos sometemos a Su palabra, Dios pelea por nosotros.

Cuando nos identificamos con Dios andando en obediencia a Él, Él se identifica con nosotros y nuestros enemigos se convierten en los Suyos.

Dios esta dispuestos a pelear contra el adversario cuando nosotros estamos dispuestos a dejar que Su palabra sea ley para nuestra vida.

Y Santiago decía que debemos primero, someternos a Dios, y luego resistir al diablo. El resultado de esta acción es que el diablo huirá de nosotros.

La triste realidad para muchos es que viven amedrentados por el diablo huyendo de él.

Pero eso es el resultado de no acatar la palabra de Dios.

Lo que muchas personas hacen es exactamente lo contrario a lo escrito: “se someten al diablo, resisten a Dios, y como resultado no hay victoria para ellos”.

Al diablo francamente le encanta que actuemos así.

Si hacemos las cosas a la manera de Dios tendremos buenos resultados, pero si preferimos hacerlas a la nuestra, enfrentaremos dolores y pérdida, además muchas frustraciones.
Author: gabtorar
•12:20
Colosenses 1:14: “en quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados”.

Todas las personas deseamos desde lo más profundo ser libres.
La libertad es un ideal pero derecho constitucional reconocido en muchos países del mundo.

Muchos levantamientos sociales han surgido debido al deseo de emancipación y libertad de algunos pueblos y culturas que vivían subyugadas.

Es que la libertad es un bien que ha sido codiciado por muchos a lo largo de la historia.

Muchas personas perdieron la vida intentando soltarse de la esclavitud en la que vivían.

Han existido naciones completas de personas cuya única razón de ser era la de servir como esclavos. Nacieron siendo esclavos vivieron como esclavos y murieron en la misma condición de esclavitud.

En la medida en que los siglos han transcurrido las legislaciones sociales sobre el tema fueron permitiendo que la esclavitud llegara a ser abolida en la mayoría de las naciones del mundo.

Muy pocos hoy tienen el estatus de esclavos y eso es una maravilla.

Pero no son pocos los que siendo libres viven como esclavos de alguna debilidad humana.

La palabra de Dios enseña que los hombres nos volvemos esclavos de las debilidades que nos dominan.

El propósito detrás de la primera venida de Jesucristo a la tierra fue “redimirnos”.

La palabra redimir no tiene mucho sentido para el común de las persona porque ignoran el gran valor que ella encierra.

Redimir consiste en rescatar al que está cautivo pagando una cantidad por ello.

Es decir, consiste en pagar el precio para que uno que es esclavo, sea libre, y la biblia enseña que Cristo nos redimió por medio de Su sacrificio en la cruz.

En la entrega de su vida, en sus padecimientos antes y durante la cruz, en el derramamiento de su sangre, Cristo estaba pagando el precio para que fuésemos libertados del poder del pecado, del poder que el diablo ejercía sobre nosotros a causa de la debilidad de nuestra carne, de la debilidad de nuestra humanidad.

A través de la historia, muchos han muerto luchando por la libertad propia y la del pueblo al que aman. Jesucristo murió para pagar el precio por la libertad de quienes le odiaban.

Y tal vez lo que más llame la atención sea que las personas generalmente no están conscientes de la realidad y poder de la redención.

Muchos viven esclavos, ya no de algún señor o amo que les subyuga y denigra, sino de algún vicio que les subyuga y denigra.

Hay millones que son esclavos del tabaco, del alcohol, de las drogas, de la pornografía, de la obscenidad, de la violencia.

Esclavos cotidianos de alguna clase de atadura del pasado, de algún trauma, de alguna mala experiencia que les impide proyectarse y que les impide disfrutar sana y agradecidamente de lo que Dios les da HOY.

Son millones los que están clavos de rencores, amarguras y miedos.

Para todo ellos la realidad, factibilidad y poder de la redención no tienen mucho valor porque la desconocen.

Imagina por un momento que tú tienes grandes deudas económicas (muchos no necesitarán imaginarlo, ¡¡las tienen!!) y que te desespera no saber cómo cancelarlas. Pero de pronto te enteras que hay a tu disposición una suma considerable de dinero, dispuesta para que la uses justamente en la cancelación de tus deudas.

¿No te parecería una maravillosa noticia?

¡¡Eso es exactamente lo que Jesús hizo en la cruz con respecto a nuestra esclavitud al pecado y la maldad!!

Él dispuso su vida como pago para que seamos libres de cualquiera cosa que nos ate en esta vida.

PODEMOS vivir como esclavos si queremos pero desde que Cristo derramó su sangre ya NO TENEMOS que hacerlo.

En verdad las ataduras son un problema… pero UNO RESUELTO para todos los que hemos entendido que, en Su sacrificio, Cristo nos redimió toral, absoluta y definitivamente de cualquier atadura de la mente, del corazón, del cuerpo, del mundo y del diablo.
Author: gabtorar
•12:19
Lucas 22:43. “Y se le apareció un ángel del cielo para fortalecerle”.

La palabra del Señor enseña que Jesús vivió un tiempo muy terrible en Getsemaní.

En ese lugar Él vivió profunda agonía, quizá como ningún otro la haya sufrido jamás.

Todos hemos tenido que atravesar por circunstancias tristes y dolorosas.

El dolor es una de esas “paradas inevitables” que tendremos que encarar mientras vivamos en este mundo.

Nos enteramos de personas que sufren cosas espantosas y terribles, tanto que uno se pregunta cómo son capaces de abrirse paso a través de tales experiencias.

Jesús es denominado como “varón experimentado en quebrantos”. Y si hay algo que con toda seguridad tiene la biblia, es que no peca de ser un libro exagerado.

Jesús de verdad tenía experiencia en situaciones dolorosas. Desde el momento mismo en que nació podemos ver que su vida no fue fácil.

Su madre fue a darlo a luz entre animales, dado que no se halló lugar para ellos en ninguna posada.

Sin tener mayores motivos le injuriaban y calumniaban. Ni hablar del castigo horrendo que padeció antes y estando en la cruz.

Que Cristo sufrió y fue experimentado en dolores es un hecho innegable.

Pero no debemos quedarnos en esto solamente.

Si la vida depara dolores y Cristo fue un varón de dolores debe haber más de algo que aprender de la forma en que Cristo fue capaz de hacerle frente a sus padecimientos.

En este aspecto el relató del Getsemaní es muy útil porque en el encontramos a un Jesús que está usando la oración como medio para hablar con el Padre y transmitirle si existe la posibilidad de que pase de Él la copa que tenía delante.

¿Qué clase de copa era esa? Una de aflicciones, indudablemente. Una en que tendría que soportar el menosprecio y la traición, la deslealtad, el abandono, y los dolores físicos más intensos que se puedan llegar a tener.

Pero he dicho que podemos aprender de Cristo y del modo en que enfrentó y triunfó sobre sus dolores.

La biblia describe su episodio en ese huerto como un tiempo de agonía. ¿Qué hacemos cuando estamos viviendo tiempos difíciles?

Muy a menudo nos entregamos a nuestra tristeza. Damos lugar al desaliento, al desánimo, bajamos los brazos, y en ocasiones HASTA soltamos la fe.

De ahí en adelante nuestro tiempo se vuelve más difícil de lo que debería ser, porque nos ensimismamos, y cerramos la puerta con llave DESDE ADENTRO para sumergirnos en nuestro dolor.

¿Será lo más correcto? Parece que no. Al menos, esto no es lo que hizo Jesús.

Dice que mientras más intensa era su agonía Él se aferraba más fuertemente al Padre

Jesús entendía bien que si la victoria sobre esa adversidad vendría de alguna parte, no vendría de sumergirse en su miedo o tristeza, sino en dejar la puerta abierta para la intervención divina…¡¡y así le ocurrió!!

A lo adverso de Sus circunstancias Él respondía con fe en Dios. ¿Hacemos lo mismo nosotros? Deberíamos puesto que funciona.

Del Padre, en respuesta, vino un ángel a fortalecerle.

Así que frente a la pregunta ¿y después de haber clamado, qué?

No te sorprenda que Dios pueda enviar un ángel a fortalecerte.

No necesariamente a sacarte del proceso, sino a darte fuerzas para atravesar el proceso.

Hay que decir entonces, que después de haber elevado un clamor reverente al Señor, siempre algo bueno de parte Suya está por ocurrir.
Author: gabtorar
•12:17
Apocalipsis 21:1: “vi un cielo nuevo y una tierra NUEVA; porque el primer cielo y la primera tierra PASARON, y el mar ya no existía más”.

Retomando la idea de si hemos llegado al fin, la palabra de Dios dice bastante sobre el asunto.

Una de las cosas que debemos establecer enfáticamente es que el mundo NO SE ACABA EL AÑO 2012.

¿Cómo poder estar seguros? ¿Qué argumentos hay para ello? Otra vez la palabra de Dios es crucial en est0.

La biblia enseña que ANTES que haya cielo y tierra nuevos, Jesús reinará EN ESTA TIERRA POR MIL AÑOS.

Esto lo menciona el capítulo 20 de Apocalipsis, que habla del reino milenial de Cristo EN esta tierra.

Una mirada contextual también nos permitirá encontrar que en el capítulo 19 del mismo libro de Apocalipsis, Jesús DESCIENDE desde el cielo para apresar a la bestia (anticristo, abominación desoladora) y al falso profeta (que había hecho señales engañosas para seducir a las personas y llevarlas a adorar a la bestia y a recibir su marca).

Pero luego, el capítulo 20 habla de los mil años de reinado de Cristo y posteriormente el capítulo 21 menciona un cielo nuevo y una tierra nueva (en la que no existe mar), que reemplazarán al primer cielo y primera tierra que ya habrán pasado.

En otro lugar de la escritura, inspirado por el Espíritu Santo de Dios, el apóstol Pedro escribe: “Pero el día del Señor vendrá como ladrón en la noche, en el cual los cielos pasarán con grande estruendo y los elementos ardiendo serán desechos, y la tierra y las obras que en ella en hay serán quemadas” (2 Pedro 3:10)

No dice exactamente de qué modo esto se llevara a cabo, pero es muy posible que sea el resultado de una confrontación con armas nucleares.

La amenaza de conflictos bélicos con uso de armas nucleares, es una posibilidad muy real en nuestros días.

Hay naciones que están deseosas de echar mano a su poderío nuclear, por descabellado que parezca.

El versículo 12b añade “ en el cual los cielos, encendiéndose serán deshechos, y los elementos, siendo quemados se fundirán”.

¿Qué cosa (TERRENALMENTE hablando), aparte de la fuerza nuclear, tiene la capacidad de producir tal devastación por medio del fuego?

Así, efectivamente HABRÁ NECESIDAD de cielo nuevo y tierra nueva.

Quizá una de las cosas más destacables sea el detalle que ofrece el Señor, que en ellos si habrá justicia.

¿Cuántas personas desfallecen porque de continuo se ven expuestas a situaciones de injusticia?

Vemos como al malo (aparentemente) le va mejor que al que hace lo correcto.

Muchas personas honestas son tentadas a actuar con principios deshonestos porque ”a la buena”, no consignen resultados.

Para todos los que desde el fondo del corazón hemos deseado que alguna vez exista verdadera justicia, ¡¡hay buenas noticias!!

Dios tiene CIELO Y TIERRA… ¡¡NUEVOS !!... en los cuales MORA la justicia.

Por ello es tan importante considerar lo que dice el versículo 14: “por lo cual, oh amados, estando en ESPERA de estas cosas, procurad con diligencia ser hallados por Él sin mancha e irreprensibles, en paz”.

Dice también la palabra de Dios que habrá señales marcando, no “el fin”, sino “el tiempo del fin”.

En Marcos 13:7-8, dice: “Mas cuando oigáis de guerras y de rumores de guerras, no os turbéis, porque es necesario que suceda así; pero AÚN NO ES EL FIN”.

8. Porque se levantará nación CONTRA nación, y reino contra reino; y habrá TERREMOTOS en muchos lugares, y habrá HAMBRES y ALBOROTOS; PRINCIPIOS DE DOLORES son estos”.

¿Has visto estas señales cumpliéndose en el mundo?

Estas, dijo Jesús, no serían EL FIN, sino el PRINCIPIO de los dolores, el PRINCIPIO DEL FIN.

¿Puedes ver cómo estas cosas ocurren delante de nuestros ojos?

Uno de los hechos más notorios de este último tiempo (a nivel mundial) son precisamente los alborotos.

Marcos es el único autor que entrega este dato en particular, y desde luego es muy útil para nosotros como observadores quienes no podemos dejar de reconocer que se están cumpliendo literalmente.

(ver última parte)
Author: gabtorar
•12:16
Daniel 12:4: “Pero tú, Daniel, cierra las palabras y sella el libro HASTA EL TIEMPO DEL FIN. Muchos correrán de aquí para allá, y la ciencia se aumentará”.

Es interesante el ambiente que se vive en estos días. Las personas a nivel mundial están cual más, cual menos, preocupadas por las muchas cosas que se dicen respecto al año venidero.

Es que el 2012 se ha convertido en el año de la controversia, en el año del fin. Al menos eso es lo que se dice.

Voces de las más diversas áreas están expresando su visión e interpretación respecto a lo que supuestamente ocurrirá en el citado año.

Para quienes seguimos al Señor, es fundamental entender lo que Dios dice al respecto, desde luego, si es que dice algo respecto.

Francamente, la escritura no entrega fechas sobre eventos futuros. En la palabra de Dios encontraremos abundantes referencias a señales que ofrecerían un marco contextual sobre el cual ciertos hechos tendrían ocurrencia.

Pero nunca fechas concretas para los eventos por suceder.

De modo que en primera instancia, no hay NADA en la escritura que identifique el 2012 como el AÑO del fin del mundo. Es0 en lo que a fechas respecta.

En segunda instancia, sobre la idea de un eventual fin del mundo, si hallamos evidencia bíblica apoyando esta idea.

Dios promete “cielos y tierra nuevos, en los cuales mora la justicia”. La escritura señala que los elementos ardiendo, serán deshechos, y otras cosas semejantes.

Así el tema no es el QUÉ sino el CUÁNDO y en ese aspecto es correcto estar atento a las señales que pudieran marcar el tiempo del cumplimiento de estas profecías bíblicas.

Es justo mencionar que lo del 2012 no está basado sobre la palabra de Dios sino sobre los estudios desarrollados por la cultura Maya.

Son los Mayas quienes citan la mentada fecha pero tampoco lo hacen aseverando el “fin del mundo” sino más bien apuntando a un CAMBIO EN LA HUMANIDAD.

¿Qué cambio podría ser? Bueno, la especulación permitiría elaborar varias teorías que encajan con la profecía bíblica.

La escritura enseña que en el postrer tiempo ocurrirán cosas locales y generales que representarán señales descriptivas del tiempo del fin.

Señales que hoy como nunca antes, tienen un tremendo valor y aplicación para los estudiosos de la profecía bíblica.

En el versículo anteriormente mencionado, a Daniel se le ofrecieron dos importantes señales que serían especialmente descriptivas del tiempo del fin: “Muchos correrán de aquí para allá”, y, “la ciencia se aumentará”.

El tránsito de las personas por el mundo de un lugar a otro es impresionante. El desarrollo de la aviación ha entregado posibilidades antes jamás pensadas para el desplazamiento de la personas. Lo mismo con el automóvil y otros medios de transporte.

Esto ha posibilitado que la gente se mueva de un lugar a otro, de un país a otro e incluso de un continente a otro…¡¡y esto en cuestión de horas!!

Pero lo anterior no hubiera sido jamás posible sin un aumento de la ciencia, que es la segunda señal indicativa del tiempo del fin, aunque no del fin del tiempo.

El conocimiento se ha multiplicado x cantidad de veces en tan solo un par de décadas.

Lo que ayer era toda una verdad reconocida y aceptada universalmente, hoy es puesto en tela de juicio por ulteriores descubrimientos y estudios.

La verdad es que esto ha traído como resultado que el mundo sea constantemente “reinventado” y ello ha afectado nuestra concepción del mismo, de la vida, de la ciencia y por cierto de Dios.

Es como si el hombre hubiera estado comiendo del árbol del conocimiento, sin comer del árbol de la vida.

Dios no es de la clase que le guste actuar infundiendo miedo a las personas. Todo lo contrario, Dios es un Dios de paz.

Tampoco es Dios de confusión. Así todo este alboroto no proviene de Él.

Algo es seguro, de acuerdo a las palabras de Jesús y a lo redactado por Daniel estamos viviendo en el tiempo del fin.

Ello debería hacernos pensar en una cosa. ¿Estoy preparado para encarar al Señor?

Porque de todas maneras, ya sea el 2012, el 2013 o mañana, un día todos vamos a partir del escenario de esta vida para en algún minuto enfrentar al Señor. Y ese día, con o sin profecía maya, se nos hará la siguiente pregunta: ¿Hiciste de Jesucristo, el Hijo de Dios, tu personal salvador? La respuesta a esa pregunta determinará nuestro destino eterno.

Hoy muchos están construyendo bunkers para el 2012, pero quienes han arreglado el problema de su salvación han encontrado EN LA PERSONA DE JESUS un lugar de seguridad y protección PARA LA ETERNIDAD.

Hoy podría ser el fin para cualquiera de nosotros. Dios no necesita esperar hasta el 2012 para retirarnos del escenario de esta vida.

Es algo que deberíamos pensar… (continuará)
Author: gabtorar
•12:15
Juan 11:37 Y algunos de ellos dijeron: ¿No podía éste, que abrió los ojos al ciego, haber hecho también que Lázaro no muriera?

Cuando se trata de criticar cualquier cosa, siempre son muchas las voces que se levantan para decir algo.

Las multitudes siempre tienen algo que aportar cuando se trata de quejarse por lo que sea que alguno haya dicho o hecho..

Hallamos frecuentemente en nosotros esa humana debilidad que nos mueve a opinar, incluso cuando nuestra opinión no ha sido requerida.

Y claro, si ocupamos un lugar en este mundo (pensamos), nuestro parecer debe tener algún grado de importancia.

Ahora bien, debemos reconocer que de la opinión a la queja hay un pequeño trecho de distancia y nuestras opiniones suelen ser más bien de orden crítico.

Por lo general, nos ofende que las persona nos critiquen aunque hay, por cierto, unos pocos que están curtidos en este asunto, ya sea, porque “han endurecido el cuero” (después de años de circo recibiendo críticas y teniendo detractores), o bien, porque definitivamente son unos desvergonzados y caraduras.

Sabemos bien, de cualquier modo, que hay de todo en la viña del Señor.

Jesús no estuvo libre de este tipo de comentarios. Él contó con gran cantidad de seguidores pero también de detractores.

Sus actos no estuvieron exentos de crítica y polémica.

Y encontramos que en el episodio de la muerte de Lázaro su accionar también fue objeto de comentarios.

“Algunos”, de acuerdo a lo que se infiere del texto, culpaban a Jesús por la muerte de Lázaro.

El argumento que esgrimían era que Jesús pudo haber evitado lo sucedido… ¡¡y no lo hizo!!

¿Te has encontrado en esa situación? Quiero decir ¿culpando a Dios por no haber actuado?

Creo que ninguno escapa a esta verdad. En algún momento de la vida hemos arremetido contra el Señor responsabilizándolo por no haber hecho algo que evitara la situación vivida.

Pero aunque Él PUEDA hacer algo, eso no significa que DEBA hacerlo.

Por otra parte, hay ocasiones en las que Dios no actúa en el preciso momento que esperábamos porque no es el tiempo correcto para actuar.

Él sabe bien cuando es el mejor momento para todo.

Y si bien en cierto que no hizo nada para impedir que Lázaro muriera, debemos ser justos en decir que Él no lo hizo porque pensaba hacer algo mejor.

¡¡Cuán cierto es que Dios no puede ni debe andar detrás de nosotros, apagando cada incendio que empezamos!!

Es cómodo vivir así ¿n0? Yo hago algo, y luego espero que Él se haga cargo.

Dios muchas veces nos permite enfrentar los costos de nuestros actos.

En el caso de Lázaro, él no estaba pagando ningún precio, solo estaba siendo un instrumento para que la grandeza del poder de Dios fueran manifiestos a los ojos de muchos, incluidos los críticos.

Hay ocasiones en que Dios no se mueve para actuar hasta que humanamente todo está perdido.

Además, los procesos como he señalado en reflexiones anteriores, producen en nosotros un acercamiento a Cristo, a la vez que un moldeamiento espiritual a la semejanza del Señor.

Sabemos que Lázaro fue vuelto a la vida por el Señor y me imagino como habrán quedado boquiabiertos aquellos que habían criticado Su aparente demora en actuar.

Si Jesús sólo le hubiera sanado, habría sido plausible pero ¿devolverle a la vida de entre los muertos? ¡¡Esas son las ligas mayores!!

De modo que la próxima vez que vayamos a hablar contra lo que Dios está (o no está) haciendo, recordemos esta enseñanza y pensemos que Su demora para entrar en la arena de juego es porque Él está pensando hacer algo mejor.
Author: gabtorar
•12:14
Hebreos 12:6: “Porque el Señor AL QUE AMA, DISCIPLINA, Y azota a todo el que recibe por hijo”.

Quizá no haya peor balde de agua fría que darse cuenta que las cosas no son lo que uno esperaba.

Es que uno debe tener expectativas para la vida, pero estas a veces son más altas de lo que deberían y cuando no se cumplen o satisfacen, producen decepción.

Ocurre con muchas de las cosas de la vida y también con el amor.

Desde pequeños crecemos con expectativas de lo que el amor debiera ser. Llegamos incluso a idealizarlo.

Las ideas y expectativas que las personas tenemos sobre el amor, no siempre son acertadas o realistas, y esto es especialmente cierto en relación a nuestra idea de cómo debiera ser el amor de Dios.

Pensamos en el amor de Dios como esa disposición Suya para perdonar cualquier cosa que hagamos.

Pensamos en el amor de Dios como aquella especial sensación de gozo, paz y plenitud que experimentamos al estar en Su comunión por medio de la acción del Espíritu Santo.

Asimismo, concebimos el amor de Dios de otras muchas formas, pero rara vez lo concebimos como aquella noble motivación divina que lleva a Dios a corregirnos y ponernos bajo procesos disciplinarios.

Las personas deseamos un Dios que sea todo comprensión y todo empatía.

Que Dios perdone, que de oportunidades, que ayude, que sane, que proteja… lo entendemos casi como una responsabilidad Suya para con nosotros.

Lo entendemos como manifestaciones prácticas de SU gran amor por la humanidad. Pero no lo vemos del mismo modo cuando Él nos corrige.

La escritura enseña que la corrección es otra manera en que Dios nos muestra Su gran amor y en este punto no siempre tenemos la visión tan clara.

Desde hace ya algunos años, el concepto de amor ha estado siendo manipulado para convertirlo en algo que no es.

Yo puedo ver en nuestros días, que la mentalidad asociada al amor no es la que corresponde.

Tenemos una generación por lo menos, que ha crecido con la idea que “si te amo, te debo dejar ser”.

Se ha diseminado la idea que los hijos, por ejemplo, lo único que necesitan es amor de parte de sus padres.

Que estos los oigan, los entiendan y en lo posible no interfieran con sus procesos internos de maduración.

Que no se les diga no, eso les ocasiona traumas (¿?) Que haya tolerancia y apertura porque los niños han cambiado.

En la década de los 80 surgió de la mano del movimiento de la Nueva Era (¿te has percatado que en esta época todo surge bajo el nombre de “movimiento”?) la idea que una nueva casta de niños superdotados estaba naciendo. Se les llamó “niños índigo”.

Ellos, supuestamente, tienen una capacidad distinta a los demás para entender el mundo y solucionar las problemáticas del mismo usando su novedosa comprensión. Suena interesante ¿no?

Pero, luego viene otra casta (es que la inventiva no tiene fin), y son los llamados “niños cristal”. Estos son especialmente “sensibles”.

Tenemos en estos ejemplos, dos generaciones que emergen bajo un distinto paradigma.

Esos niños son especiales, y por tanto, INTOCABLES.

La única clase de amor posible de compartirles es aquella en que tu rol (como padre) se limita a ser un mero asesor. Encárgate de proveerles, acompañarlos entenderles, pero deja que ellos decidan como vivir su vida.

Junto a estas generaciones se levantaron políticas internacionales con la “sana intención” (¿te lo crees?) de proteger a los niños del maltrato parental.

Las nuevas disposiciones indican que es impropio e ilegal para un padre disciplinar físicamente a alguno de sus hijos.

No podrás tocarlos porque te expones a sufrir el rigor de las penas establecidas en la ley.

Aun los delincuentes gozan de más beneficios que los padres. ¿A dónde pretendo llegar con esto’

Al hecho que muchos no logran ver la conspiración ANTI DIOS que hay detrás.

La figura de Dios ha sido resumida a su carácter perdonador y ayudador: “si hay algo que Dios debe hacer es ayudar a los hombres, pero el hombre TIENE DERECHO A VIVIR SU VIDA COMO LE PLAZCA”. (Es lo que reza el postulado humanista).

Dios no tiene derecho a corregir o a disciplinar. La gente mala hace eso. Si Dios lo hace es malo.

Los buenos, los que de verdad aman te dejan SER y HACER lo que gustes. Total, en el camino vas a aprender

Esa mentira nació en el corazón mismo del diablo.

Él es el engañador y mentiroso. Pero ¡¡cuánto éxito tiene entre los mortales!!

Estarás de acuerdo conmigo en que ese es el pensamiento predominante en nuestros días.

Las personas no conciben que Dios corrija o discipline nuestros pasos. Mucho menos que pueda castigar.

Nos gusta oír de un Dios que ayude pero no de Uno que se entremeta en nuestros asuntos o decisiones, para eso somos libres, es el argumento que utilizan.

Debo decir que el amor de Dios es tal, que se atreve a disciplinar. Y eso lo vuelve muy impopular.

Especialmente en una época cuyo paradigma principal es satisfacer al cliente. Así todos compiten por el rating.

Pero aunque el Señor siga bajando en la escala que mide el rating de popularidad terrenal por causa de sus principios (y yo con Él por compartirlos) no claudicará en Su propósito de mostrarnos Su amor, no solo por medio de ciertas concesiones de favores y respuesta a oraciones, sino principalmente por trabajar en nosotros, corrigiendo lo que sea necesario para llevarnos a la altura del varón perfecto que es Cristo el Señor.

Muchas veces el amor de Dios viene disfrazado de un proceso disciplinario, pero es amor igual, y del bueno.
Author: gabtorar
•12:12
Juan 8:36 “Así que, si el Hijo os libertare, seréis verdaderamente libres”.

A medida que realizo mi trabajo pastoral, me he encontrado con un factor que se ha vuelto común denominador para muchas personas a las que he tenido la oportunidad de asistir.

Uno sabe que ha sido llamado a ayudar al prójimo. Algo así como lo que dice el refrán popular: “has el bien, sin mirar a quien”. Creo que ha sido una constante en mi vida.

Para explicarlo mejor, he intentado disponerme para que Dios use mi vida en donde sea que Él quiera, con quien Él quiera, y como Él quiera, sin miramientos y sin pre requisitos de ninguna especie.

Nunca he objetado servir al Señor haciendo distinciones entre denominaciones e incluso religiones.

No obstante, no puedo negar que hay un factor común entre muchas de las personas que Dios me ha permitido ayudar y que simplemente es difícil de entender. Me refiero a “las lealtades malentendidas”.

Muchas (por no decir TODAS) personas con las que me he encontrado, de algún modo me han expresado lo mismo: que han buscado esa ayuda “extra” porque en lo que tienen no encuentran las respuestas a sus problemas o dilemas.

Que lo que tienen es insuficiente o ineficaz para lo que están viviendo y por tanto, se ven en la necesidad circunstancial de golpear otras puertas, de recurrir a otra clase de ayuda.

Permítame ser más osado, más claro aún: hablo de personas que, por ejemplo, llevan congregándose en algún sitio (normalmente) varios años y arrastran esos problemas casi la misma cantidad de años, porque ahí no han hallado lo que en verdad necesitan.

Sé que este tema a alguno podrá parecerle ofensivo, pero ¿no dijo Jesús que la verdad nos haría libres?

Sin la intención personal de querer hacerles abandonar lo que tienen, (por ejemplo, la congregación en que están) pero claramente observando la futilidad de continuar arraigados o comprometidos con sistemas religiosos que no resuelven sus necesidades concretas, me he preguntado (más veces de las que puedo recordar) cómo es que las personas pueden llegar a estar tan obsesionadas a veces con fijaciones, y mal comprendidas lealtades, que terminan siendo muy poco prácticas a la hora de la verdad.

Cada día me doy (más) cuenta que Dios es práctico, que el evangelio es práctico, que la metodología de Dios es práctica. En síntesis, que la vida cristiana ES MUY PRÁCTICA, pero nosotros la hacemos muy mística.

En un futuro no muy lejano (Dios mediante) voy a referirme más puntualmente a este tema.

Pero por lo pronto, mientras Dios es tremendamente práctico a nosotros nos seduce la “mística equivocada”.

Eso hace que “el camino” se haga más largo y más difícil de lo que en realidad es.

Jesús dijo si tu mano, tú ojo, o lo que sea, te es ocasión caer, ¡CÓRTALO, DESHASTE DE ELLO!

Práctico ¡no? ¿Qué hacemos nosotros?

Bueno, ponemos el asunto en oración, o buscamos algo en la escritura que nos muestre otra opción para aquello sobre lo cual Dios ya se ha pronunciado dándonos Su punto de vista y expresando Su voluntad.

Tantas personas me han dicho que no sienten la confianza con su pastor, que no hayan verdadera ministración o alimento espiritual en los lugares a los que asisten (independiente de la religión que se trate). Que se sienten vacíos, que los mensajes que oyen nunca apuntan a las realidades que viven…en resumen, que están perdiendo el tiempo estando en esos lugares.

¿Pero sabes qué? ¡¡Continúan allí!!

Creo tener una limpia y tranquila conciencia ante Dios de no haber robado nunca una oveja a nadie. Mucho menos de haber ofrecido a alguno algún incentivo para que abandone su congregación y venga a ser parte de la nuestra. Sé que hay personas que pueden testificar de la veracidad de esto.

Y pienso que ello, sumado a una real preocupación por el bienestar espiritual de las personas, me da la moral necesaria para tocar este tema que es bastante frecuente de acuerdo a lo que me toca vivir cotidianamente.

Lamento encontrarme con personas que salieron de la esclavitud del mundo para ENTRAR en una esclavitud religiosa, viviendo sujetos a preceptos de hombres u organizaciones que como ya sabemos, no tienen poder sobre el pecado o la maldad, y que no libertan (no pueden), porque sólo la verdad de Cristo trae verdadera libertad.

Cuando las personas comienzan a darse cuenta que el problema nunca ha sido el Señor o Su palabra (en ello siempre está la solución al problema) sino en la clase de mensaje que han estado oyendo, y que para tener ese cambio tan anhelado es preciso abandonar ese sistema, uno se da cuenta recién, de lo poderosas (y destructivas) que son las lealtades mal entendidas.

Para ellos, abandonar sus congregaciones (nunca lo pido, pero me doy cuenta) NO ES UNA OPCIÓN. Para ellos sería una imperdonable deslealtad

Me pregunto ¿Contra quién?

Definitivamente no contra el Señor.

Efectivamente, Dios nos llama a ser leales y también a estar comprometid0s. Pero siempre Su llamado es a estar comprometidos con Él en primera instancia, con Su propósito, con Su plan, con Su voluntad y con SU verdad, con esa que SI nos liberta.

Ninguna otra lealtad debiera ser mayor que esta, ningún otro compromiso debiera más fuerte que este. Pero me temo que para muchas personas esta no es la norma de vida.

Prefieren (a muchos les han convencido de) ser leales a un hombre u organización antes que a Aquel a quien realmente se deben por completo.

Debemos tener mucho cuidado de ser leales, pero con quien realmente corresponda.

Por sobre las denominaciones, organizaciones, religiones y personalidades ¡¡El Señor merece nuestra mayor lealtad!! (…continuará)
Author: gabtorar
•12:09
Proverbios 4:18: “Mas la senda de los justos es como la luz de la aurora. Que va en aumento hasta que el día es perfecto”.

La vida cristiana es un constante proceso de crecimiento.

En este verso, la senda del justo es semejante a la luz de la aurora, que va mostrándose lentamente, de a poco, pero que llega a ser potente cuando alcanza su plenitud.

Pero lo anterior es producto de un proceso, un proceso gradual de crecimiento.

El diccionario define proceso como “el conjunto de las fases sucesivas de un fenómeno natural o de una operación artificial”.

Así, el proceso de la vida cristiana se entiende como las fases por las que un cristiano atraviesa en su andar con Dios y en su transitar por el camino de la fe.

Si uno se detuviera a pensar cuántos procesos ha atravesado desde el momento en que depositó su vida en las manos de Jesús hasta ahora.

Son incontables las situaciones por las que hemos pasado ¿verdad? Lo que hace muy difícil poder detenerse en cada una de ellas, ¡es que han sido demasiadas!

Lo maravilloso es que ninguna de ellas ha carecido de propósito en Dios.

El Señor no hace nada porque sí. TODO en Él cumple una función. Todo en Él es parte de algo, de un proceso, mediante el cual el Espíritu de Dios nos está transformando para llegar a ser más y más semejantes a Jesús.

¿¡Cómo no alabar al Señor, por concedernos el gran privilegio de ser hechos semejantes al Salvador!?

Desde luego, en muchas fases del proceso, sentimos que no vamos a ser capaces de continuar.

Las circunstancias nos agobian, nos sobrepasan y cumplen así inequívocamente con su rol que es llevarnos a una total aniquilación de los que somos, de la confianza en nuestros recursos (humanos y materiales, etc…) y a una total dependencia DEL Señor.

Detrás de muchas de las cosas que vivimos, el propósito es este principalmente: Que aprendamos a confiar en Dios, a descansar sobre la base de Su fidelidad, de Su control sobre cualquier circunstancia.

Dios desea que crezcamos en amor, en paciencia, en fe, en servicio, en pureza, en el conocimiento de Cristo… ¡¡en todo!!

Y para llevarnos a ese crecimiento necesitamos vivir procesos.

Quiero citar un ejemplo, que a mi juicio es representativo del modo en que Dios puede tratar cualquier otra situación nuestra.

A veces pedimos a Dios que nos de paciencia.

Nuestra manera de entender las cosas (ya sabemos) es distinta a la de Dios)

Cuando nosotros pedimos al Señor paciencia, lo que estamos tratando de decir es: “Dios, tu sabes que yo soy impaciente, que cualquier cosa me inquieta y me pone ansioso. Te pido que desde el cielo MANDES algo que me VUELVA paciente”.

Así es como oramos ¿verdad? Y esperamos que algo sobrenatural ocurra que de pronto NOS VUELVA ESO QUE NO SOMOS.

Que la varita mágica de Dios nos toque y nos cambie milagrosamente.

Pero ahí justamente comienzan nuestras frustraciones, cuando en lugar de ello, notamos que empezamos a ser bombardeados por circunstancias que nos llevan en el sentido opuesto.

Uno termina preguntándose ¿Qué es eso? ¿Qué está haciendo Dios? ¿Me habrá escuchado?

Eso es un proceso. Uno en el cual Dios trabajará con nuestra impaciencia.

Esto mismo es aplicable a la mayoría de nuestras áreas.

Tú pides capacidad para perdonar, y de repente, parece que todos se ponen de acuerdo para ofenderte o calumniarte o dañar tu imagen o testimonio. ¿Qué es eso? ¡¡Un proceso, una oportunidad para trabajar el perdón, para crecer en Dios!!

Pedimos ser buenos administradores, y en mente tenemos que Dios nos va a dar tantos recursos, que vamos a tener en abundancia para ahorrar.

Curiosamente ocurre lo contrario: nuestro presupuesto se achica (extrañamente aunque no es extraño, Dios está actuando, respondiendo nuestra oración) y nos vemos en la necesidad de ajustar el cinturón de la economía.

Paradójicamente ahí descubrimos dos cosas: por una parte, que vivíamos una vida de despilfarros, y por otro, que había en nosotros una capacidad de ahorro que no habíamos descubierto y que por fin es necesario utilizar.

Todo ello suele ser doloroso para nosotros. Que Dios trabaje rompiendo nuestras costumbres y moldes siempre produce algo de dolor. Pero el resultado del proceso es sorprendente.

Después de dejar que Dios haga lo suyo en esos procesos, no volvemos a ser los mismos.

Es que los procesos nos cambian, nos transforman y nos acercan a Jesús.
Author: gabtorar
•12:08
Juan 7:4 “no juzguéis según las apariencias, sino juzgad con justo juicio”

Muchas diversas ideas pululan en el entorno.

De tiempo en tiempo, uno se entera que los avances en el estudio de ciertas disciplinas, dejan al descubierto la inexactitud con que se entendían ciertos fenómenos.

Tal es el caso de la idea que existía hace siglos, referente a la forma de tierra. Hoy en día TODOS saben que el globo terrestre tiene forma achatada, pero por siglos se creyó que esta era cuadrada.

Uno puede reírse todo lo que quiera por esta descabellada idea pero en su tiempo era LA VERDAD DOMINANTE y prácticamente TODOS… ¡¡lo creían así!!

Asimismo, en los distintos saberes existentes, los descubrimientos e investigaciones posteriores han dado nueva luz cambiando la perspectiva que había sobre ellos.

Est0 en ocasiones ha sido tremendamente clarificador y útil, pero también ha sido foco de confusión.

Hay temas sobre los cuales no hay acuerdo, respecto al potencial daño que pueden producir en el organismo.

Aludiendo a investigaciones unos aseveran una cosa y otros lo desmienten… pero bueno, muchas cosas dependen del cristal con que se miran.

La interpretación escritural no escapa a esta regla.

En muchísimas ocasiones malinterpretamos lo que dice la palabra de Dios y terminamos creyendo cosas que no ciertas.

Uno de los muchos temas en que aplica esta verdad es en lo concerniente a juzgar.

Frecuentemente escuchamos personas decir que ellos no son quienes para perdonar, que solo Dios tiene esa potestad ¿Será cierto?

De igual forma, encontraremos a muchos que ni siquiera se atreven a decir lo que realmente piensan o sienten por no ser tildados de jueces o ser acusados de juzgar.

El tema surge básicamente de una mala interpretación de lo que es juzgar o en qué circunstancias se debería juzgar.

Lo primero es decir que siempre uno está emitiendo juicios de valor sobre distintas cosas, y también personas.

Lo que ocurre es que juzgar es inevitable, es algo de lo cual no nos podremos escapar.

No escaparemos ni de juzgar ni de ser juzgados, por eso es tan importante entender lo que la biblia dice sobre el asunto.

Por supuesto, nosotros no somos Dios y no tenemos la potestad de dar una palabra definitiva sobre las cosas o las personas, pero si podemos (y en algunos casos debemos) ser capaces de transmitir lo que Dios ya ha dicho sobre tales ciertos asuntos y personas.

En una empresa la última palabra la tiene el gerente pero desde el portero hasta el mismo gerente pueden y deben seguir la misma línea de pensamiento, que corresponde a aquella definida institucionalmente.

Las personas, en particular los cristianos, podemos parecer críticos porque ponemos énfasis o le asignamos valor a cosas o valores que para otros no significan nada, pero al hacerlo, básicamente estamos retransmitiendo la palabra de Dios y estamos siguiendo la línea institucional.

Además, según el registro d Juan, Jesús aclara un aspecto fundamental a la hora de emitir un juicio: debe ser justo y no estar basado en apariencias.

Así, parece ser que juzgar no es el problema, sino juzgar mal.

Dios ama la verdad, ama la justicia un juicio injusto es un atentado directo contra la justicia, y eso Dios no lo acepta.

El que ligeramente abramos la boca para desacreditar a otros sin saber la verdad, es lo que el Señor censura.

Cada vez que ponemos culpa sobre un inocente estamos haciendo lo que no deberíamos.

Pero no hay que confundir las cosas. Son los hijos de Dios quienes mayor autoridad tienen para retransmitir lo que el justo ya acepto al Señor.

Por ello, me temo que hemos estado equivocados al pretender mantenernos al margen de ciertas situaciones.

Juzgar a un inocente es tan malo como no condenar a uno que es culpable.

Por ello, sostengo, sin ser juez de nadie en particular pero teniendo la responsabilidad de transmitir la verdad que Dios ya ha revelado, que aunque no debemos juzgar nada antes de tiempo, tampoco tenemos derecho a hacer vista gorda de aquello, que por las claras, Dios ha manifestado que está mal.
Author: gabtorar
•12:07
Juan 15:18 “Si el mundo os aborrece, sabed que a mí me ha aborrecido antes que a vosotros”.

Sé que hay muchos casos en que podemos decir que la contienda es desigual.

Es desigual cuando las personas se enfrentan con la sinceridad de sus argumentos a quienes vienen contra ellos con la prepotencia de sus jinetas y amplio espectro de influencia.

Es desigual cuando se mide a las personas en base a lo que tienen y no en base a lo son.

Es desigual cuando uno es juzgado y criticado por actuar motivado por la clase correcta de amor que dice la verdad aunque sea dolorosa o chocante. Mientras que otros son alabados por usar la elocuencia de sus palabras para lisonjear a quienes les oyen y hacerles adeptos a punta de mentiras.

La contienda es tremendamente desigual cuando personas que llevan vidas licenciosas e inmorales se sienten con la facultad de reprochar a quienes se esmeran por vivir vidas correctas.

Jesús es el mejor ejemplo en todo lo que acabo de mencionar.

Él fue criticado, malentendido, acusado injustamente, menospreciado… ¿y cuántas otras cosas más?

Jesús fue castigado en todos los sentidos posibles e imaginables y eso a pesar que en todo hizo siempre lo correcto.

La contienda fue siempre desigual para Jesús. Había un grupo organizado de religiosos que tramaban su muerte y que conspiraba constantemente contra Él.

Él, por su parte, seguía adelante con la visión que le trajo desde la Eternidad.

¡Qué alta dejó la vara el Señor. Tenemos tanto que aprender de Él!

Una de las cosas que debemos aprender de Él, es a ser tenaces.

La tenacidad es descrita como la firmeza y constancia para cumplir un objetivo. Jesús fue en extremo tenaz. Y claro, uno debe serlo siempre, y en especial cuando la contienda que uno lucha es tan desigual como es el caso de los cristianos evangélicos.

Ahora bien, haciendo honor a la verdad de la palabra, Jesús no vino a fundó una iglesia con apellidos. El no llamó a los cristianos: Católicos, Evangélicos, Bautistas, Adventistas o cualquier otro nombre que tu hayas escuchado por ahí.

Él simplemente vino a hacer discípulos y dijo que su padre, madre y hermanos, eran aquellos que oían la voluntad de SU Padre y la cumplían.

Desde esa perspectiva poco importa lo que tú o yo pensemos. Si eso no está de acuerdo con lo que Dios dice, no llegará muy lejos. Al menos, no más allá de esta vida

Con un enunciado tan categórico, Jesús zanjó cualquier diferencia que podamos tener (o aun queramos poner) para establecer la supremacía de un grupo o religión por sobre otro.

Cristo es el Señor, el Maestro y los que siguen su doctrina, enseñanza y ejemplo son discípulos suyos.

Por lo pronto, la contienda es, y seguirá siendo desigual, en tato el cristianismo sea llevado a la manera de los hombres y no a la del Señor.

El secularismo seguirá amando y promoviendo lo suyo con la misma fuerza que seguirá aborreciendo aquello que no tiene su sello o su espíritu.

Por eso, te aliento en este día, hombre o mujer de Dios, a seguir poniéndote de pie por las verdades de Cristo por más impopulares y malentendidas que estas sean, porque cercano está el día, en que el Señor mismo traerá recompensa a quienes nos hallamos conducido fielmente.
Author: gabtorar
•12:05
Juan 15:18 “Si el mundo os aborrece, sabed que a mí me ha aborrecido antes que a vosotros”.

Ayer decía que la contienda es desigual.

La idea surgió de una entrevista que se hacía a un conocido hombre (confeso católico) en una radio emisora.

Respondiendo a una pregunta relacionada a la opinión que un obispo evangélico dio en relación a algunos derechos de las minorías sexuales, este conocido señor, con delicadeza condenó la postura que este obispo tiene de las relaciones entre homosexuales y lesbianas y se limitó a hablar del amor de Dios, a resaltar que Dios conoce los detalles (lo cual es cierto) y que un día, este líder se las tendrán que ver con Dios por su drástica y aparentemente condenatoria postura.

Esto me hace pensar: “¡Qué fácil es ganar el corazón de las personas! Todo lo que tienes que hacer es decirles lo que ellos desean escuchar”.

Somos muy susceptibles de ser engañados.

Los derechos de las minorías sexuales es uno de los temas del momento, y hablar CONTRA esto es francamente ponerse una soga al cuello, porque ser gay o lesbiana se ha convertido en toda una moda. Y decir cualquier cosa en contra se ha vuelto a su vez tremendamente impopular.

Las personas podemos tener opiniones a favor o en contra de este o cualquier otro tema, pero uno DEBE aprender a ser consecuente con lo que cree y un cristiano no tiene derecho a creer lo que se le antoja. Un cristiano es uno que se ha puesto a las plantas de Cristo, de Su verdad y de Sus enseñanzas.

De modo que no se trata de lo que yo quiera pensar o creer antojadizamente, sino de lo que Dios dice sobre este o cualquier otro tema.

¿Qué dice la biblia sobre las minorías sexuales? Bueno dice lo que este obispo evangélico estaba reproduciendo.

Cuando uno habla debe asegurarse que está reproduciendo el mensaje DE Jesús, de la palabra de Dios y no el propio solamente.

Los cristianos DEBEMOS reproducir ese mensaje, el de Cristo.

¿Qué dice Dios sobre los homosexuales? Dejemos que sea su misma palabra la que hable, después de todo, ella es la norma de vida del cristiano ¿No?

1 Corintios 6:9: ¿No sabéis que los injustos no heredarán el reino de Dios? No erréis; ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los AFEMINADOS, ni los que se echan con varones”.

Este obispo evangélico no dijo nada que vaya contra la palabra de Dios. Solo reprodujo lo que está en Su palabra.

Pero a las personas no les parece. Las personas quieren un Dios que deje ser a cada cual en lo suyo. Pero no es la clase e Dios que uno encuentra en la biblia.

El amor de Cristo es perfectamente compatible con su santidad.

Cuando a Jesús le presentaron a una mujer sorprendida en el acto mismo de adulterio, Él dijo que ni yo te condeno” pero ASIMISMO AGREGÓ “no peques más”.

Todos entendemos muy bien la parte que dice “ni yo te condeno”. Pero ¿Qué significa ese “no peques más”? Simple: “NO vuelvas a adulterar”.

La contienda es desigual cuando un hombre enfrenta las sociedades con la verdad del Señor (la que a veces duele reconocer o aceptar porque choca con conceptos equivocados que tenemos internalizados) mientras que otro se queda en el discursos liviano y cómodo que es aceptado por todos.

La razón por la que la iglesia ha tenido mártires a través de las edades es porque Dios ha encontrado en ellos hombres y mujeres que se han puesto de pie para declarar, no lo que las multitudes DESEAN escuchar, sino lo que Dios TIENE PARA DECIR.

Son personas que han hablado la verdad de Dios porque tenían el amor de Cristo en sus corazones.

Muchos confunden las cosas. Para muchos no tocar temas sensibles es un acto de amor. Para Dios lo es poner el dedo en la llaga, porque tratar con esa llaga es la única manera real de lograr verdadera sanidad.

La contienda es desigual cuando hay religiones que convierten el amor de Dios en una GREEN CARD espiritual, que les permite vivir como quieren sin mayores compromisos con Dios y sus demandas.

Cuando Jesús advirtió a sus discípulos que el mundo los aborrecería estaba diciendo que el mantenerse en pie sobre la base de las convicciones de Su palabra pondría enemistad entre ellos y el mundo alrededor.

Cuando tú te levantas para vivir las verdades descritas en la palabra de Dios te das cuenta de cuan reales y pertinentes son las palabras de Jesús.

Los cristianos somos ridiculizados por practicar sistemas bíblicos como el diezmo, por ejemplo, que consiste en apartar el 10 % de las ganancias o entradas para el sostenimiento de quienes se dedican al trabajo de la iglesia como ocurre con algunos pastores.

Las personas se burlan de aquellos que creen y practican esto como un principio estipulado por Dios.

Se sienten con derecho a criticar, a hablar mal y reírse entre otras cosas.

Por supuesto, tales personas jamás diezmarían un solo peso a ninguna iglesia, porque lo encuentran una estupidez, pero no se dan cuenta que entregan mucho más que el diezmo de lo que ganan a las tabacaleras , a las empresas productoras de alcohol y cerveza (sin mencionar la hípica, los juegos de azar, y otras prácticas menos útiles aun)

La contienda es desigual cuando una persona que NO ENTIENDE de lo que habla, se siente con el derecho de criticar lo que hacen otros que Si ENTIENDEN lo que hacen.

La opinión de ese importante señor se transformará en un referente (y VERDAD) para muchos otros que como él, no han entendido que los evangélicos no aborrecemos a las minorías sexuales.

Simplemente tenemos el deber de transmitir el mensaje que Dios ha entregado en su palabra.

En qué habrá más amor: ¿En tratar el tema y advertir o en desligarse del asunto descontextualizando el amor de Dios y haciendo vista gorda? (…continuará…)
Author: gabtorar
•11:42
Juan 15:18 “Si el mundo os aborrece, sabed que a mí me ha aborrecido antes que a vosotros”.

Mientras me dirigía a hacer algunas diligencias, conducía el auto y escuchaba un programa radial de noticias.

En eso me encuentro con una entrevista a un hombre católico famoso en Chile. Se trata de un hombre que ha logrado bastante popularidad a causa de la labor social que realiza.

Desde luego esa gran popularidad más que por el trabajo que DE HECHO realiza, ha sido potenciada a través de la cobertura que le dan los medios de comunicación, especialmente la televisión.

No creo para nada ser un hombre envidioso, (quienes me conocen sabrán si lo soy o no) y mis palabras pueden sonar así, sin embargo, sólo deseo graficar que el gran trabajo social de la iglesia evangélica simplemente no cuenta con la misma cobertura. La contienda es desigual.

Los evangélicos aparecen en la TV chilena básicamente para ser acusados de fanatismos, para criticar el dinero que recibimos los pastores por concepto de diezmos y para de vez en cuando poner en el tapete algún escándalo sexual protagonizado entre algún pastor y alguna de las personas de la congregación que lidera o el abuso de algún niño.

Esta situación es de hecho tremendamente injusta y aunque es muy lamentable que esto suceda, ese es el mundo real.

El Señor adelantó a los suyos que el mundo los aborrecería

El mundo secular tiene sus favoritos y a estos lo aclama, celebrando cada una de sus acciones.

Del mismo modo es implacable con aquellos que no le resultan tan amigables.

La iglesia evangélica tiene además el cartel de ser la que toca el desagradable tema que ninguno quiere escuchar, esto es la pecaminosidad del hombre, y su condición caída en contraste con la santidad de Dios.

No tengo ningún empacho en reconocer que hay muchos evangélicos que le hacen un grueso favor al diablo.

Que el problema de nuestra humanidad sea el pecado, por supuesto, no nos da derecho a restregar esa realidad en las narices de las personas. Especialmente cuando lo que ellos necesitan es entender que el real valor del evangelio radica en que Cristo vino a ofrecerse como la salida para ese gran problema.

Así, me parece que el incorrecto mensaje que la iglesia evangélica entrega es el problema.

Con esto estoy reconociendo claramente que el problema no es el evangelio, sino la manera en que éste es entregado por algunos de nosotros.

Ahora bien, reconocer que al interior de las iglesias evangélicas no se vive en perfección es lo más correcto y veraz.

Me temo que, desde esa perspectiva, la antipatía que muchos sienten por la iglesia evangélica es comprensible.

Para muchos, los evangélicos somos hipócritas que salimos a las calles a hablarles a otros, de los pecados que nosotros mismos no hemos llegado a solucionar.

Y claro, viendo las cosas de ese modo, “sentir antipatía es razonable”.

Pero no es justo limitar la iglesia evangélica a esto solamente. ¡¡Ella es mucho más!!

Si debemos reconocer que ese es UNO de sus desaciertos, debemos también reconocer sus MUCHOS aciertos.

Pero para ello no existe la misma voluntad.

Lo jocoso del asunto es que en cierto modo aquellas personas que se denominan cristianas y que rechazan a la iglesia evangélica, están desconociendo su propia naturaleza.

Todos los cristianos, lo somos como resultado de haber tenido un encuentro con Cristo ¡¡y Cristo en ninguna otra parte Cristo es mejor revelado que en los evangelios!!

En ninguna otra parte las enseñanzas de Cristo son mejor expuestas que en los evangelios.

De modo que los cristianos SOMOS evangélicos. Y los evangélicos DEBEMOS ceñirnos al evangelio, a la palabra de Dios. (continuaré con esta idea en la segunda parte)

Aquellos que desconocen el trabajo que hacen los evangélicos cometen una gran injusticia, no contra ellos solamente, sino principalmente contra Dios.

Las miles de personas que han cambiado sus vidas, gracias a la interacción, mediación y labor que Cristo hace por medio de la iglesia evangélica son el ejemplo vivo, el fruto de la obra de esta iglesia.

Los medios de comunicación están muy llanos a reconocer cada grande o pequeño aporte que otras religiones hacen en favor de la sociedad, pero no están igualmente dispuestos a ensalzar el tremendo trabajo de Cristo a través de la iglesia evangélica.

Si los evangélicos como grupo religioso y si los pastores como ministros de Cristo gozáramos de la difusión (además de otros privilegios) que otras religiones disponen, ¡¡otro gallo cantaría!!

Desde los medios masivos, siempre el tono hacia la iglesia evangélica es denigrante y peyorativo.

La visión y por tanto, PERCEPCIÓN que existe en la sociedad de lo que ES y HACE la iglesia evangélica sería muy diferente si se le brindaran a esta, las posibilidades que a otras se les conceden.

Jesús NO DIJO que criticar fuera un problema. Pero hay quienes no lo entienden así.

Lo que el Señor SI DIJO fue que “para ver la paja del ojo ajeno yo debía tener suficiente visión en mi ojo como para PRIMERO ver mi viga”.

Las personas que ven la paja en el ojo de la iglesia evangélica, caen en el mismo error que critican de esta. Y eso no permite avanzar a ninguna parte.

Nuestra sociedad necesita un alzamiento espiritual en eso estamos todos de acuerdo. Y la iglesia evangélica aporta significativamente en este aspecto.

Cada vez que un delincuente es rehabilitado. Cada vez que un alcohólico o drogadicto es liberado de estas fuertes cadenas. Cada vez que un hombre aprende cuál es su rol, y cuál es el trato que debería tener con su esposa e hijos. Cada vez que las personas dentro de las iglesias evangélicas aprenden a respetar las autoridades establecidas y a orar por ellas en lugar de apedrearlas, en fin… Cada vez que esto sucede la sociedad mejora y es una gran injusticia, que para ello la iglesia evangélica no tenga derecho a tribuna.

Sobre lo que decía ese popular hombre, hablaré mañana… si Dios quiere.
Author: gabtorar
•11:41
Amós 3:3 ¿Andarán dos juntos si no estuvieren de acuerdo?

Una de las cosas más sobresalientes de la vida de Jesús es su extraordinario nivel de acuerdo con el Padre.

Jesús reconoció que no hacía nada por su cuenta y que lo que hacía era lo que veía al Padre. En la tentación del desierto vemos que el enemigo intentó la estrategia de llevarlo a actuar en su capacidad, pero Cristo se rehusó a actuar para complacer al diablo, y despejar así cualquier duda respecto a su posición, autoridad y procedencia.

Él se mantuvo en la palabra de Dios, y reservó sus milagros y señales para el tiempo indicado por el Padre.

Desde luego el diablo no halló lugar en Jesús en el cual poder operar.

Cada intento suyo por desviar a Jesús y hacerlo actuar de manera discordante con el Padre fracasó.

Cristo sabía bien a quien servía, entendía bien a quien se debía.

Este es un elemento clave para no desviarnos del propósito divino.

He compartido en escritos anteriores que hay distracciones que se disfrazan de oportunidad. Estas terminan alejándonos del plan del Señor. Pero en estas cosas actúan el engaño por un lado, y la falta de claridad de propósito, por otro.

Hay centenares de personas que bien intencionadamente hacen cosas que les apartan de Dios y no se dan cuenta.

Es vital que los cristianos nos preguntemos de manera constante qué o quién nos está moviendo.

Aquello que estoy haciendo o lo que planeo hacer ¿Viene realmente del corazón el Señor? ¿Es parte de Su plan para mí?

La biblia dice que Cristo es la cabeza de la iglesia. La iglesia es a su vez, el cuerpo de Cristo.

Un cuerpo sin cabeza carece de propósito de dirección. Es desde la cabeza que el cuerpo es dirigido.

La mente de Cristo es ilimitada.

Los pensamientos de Dios, dice la escritura, “son más altos que los nuestros”.

Las oportunidades que nos ofrece ser el cuerpo de una cabeza como Cristo son ilimitadas.

Pero para que esas maravillosas ideas se concreten esa cabeza necesita un cuerpo que se mueva acorde con ella.

Si la cabeza ordena que mi mano se mueva y esta se rehusa a hacerlo, ¿podrá llevarse a cabo el propósito que la Cabeza tiene para esa mano por más grandioso que sea? No lo creo.

Necesitamos valorar el poder que hay en estar de acuerdo con el Señor. Asimismo dejar que esa Cabeza Bendita llamada Cristo dirija nuestros pasos.

Una de las mayores necesidades de la vida cristiana es esta de aprender a obedecer a Jesús, a la palabra de Dios.

Es en la obediencia a Su palabra donde mejor se muestra nuestro acuerdo con Él.

Y como ya sabemos, “en la obediencia está la ganancia”.
Author: gabtorar
•11:40
Amós 3:3 ¿Andarán dos juntos si no estuvieren de acuerdo?

Previamente hemos establecido que no es posible que dos puedan andar juntos sin que entre ellos haya acuerdos.

Esto no solamente es cierto para la relación entre las personas, sino también para la relación entre Dios y los hombres.

Dios intenta llevarnos a esta clase de acuerdo con Él, de modo que podamos contar con Él y con Sus recursos.

El Señor usa Su palabra para (por medio de ella) generar en nosotros el pensamiento correcto.

Es indispensable que nosotros comprendamos el valor y las bondades de llevar una vida de “acuerdos” con Dios.

Pero es curioso notar que el desacuerdo entre Dios y los hombres no partió en el corazón del hombre.

La idea de poner controversia entre Dios y los hombres vino del diablo.

Todo estaba en paz en el Edén HASTA que la serpiente introdujo en la mente del hombre la idea de tomar decisiones fuera de Dios.

Yo he dicho muchas veces que uno solo puede dar lo que tiene y fue el diablo (primer rebelde de toda la creación) quien primero albergó esta idea de independizarse de Dios.

No contento con ello la diseminó entre los ángeles y posteriormente entre los hombres.

Con el paso de los siglos esta idea de llevar una vida independiente, no ha hecho más que enraizarse en el corazón de las personas y hoy día, prácticamente TODOS vivimos dirigidos por esta mentalidad que ha convertido a Dios en un extraño en Su mundo y entre Sus propias criaturas.

Satanás ha trabajado a las personas con la idea que tienen derecho a decidir lo que van a hacer con su vida. Vida que por cierto, no nos pertenece, que no viene de nosotros mismos.

El gusto por hacer las cosas de acuerdo a nuestro parecer nos aparta del parecer del Señor.

Mientras que la idea de Dios es ser protagonista en nuestra vida, la del enemigo es que Él tenga un papel secundario.

Mientras que Dios desea que Su palabra nos dirija, esta idea que vino de la mente del diablo nos convence que nuestra propia palabra es la que debe dirigirnos.

Mientras que Dios nos quiere llevar por la derecha, esta mentalidad nos influencia a que deseemos ir por la izquierda.

Esta falta de coordinación y de acuerdos, produce terribles consecuencias en nosotros.

Aun cuando Dios nos puede y quiere proteger, ser movidos por esta mentalidad diabólica de independencia, nos priva de la gran ayuda que Él nos quiere dar.

Sin embargo, las decisiones lejos del Señor, nos llevan justamente en el sentido contrario al que Dios quiere llevarnos.

Por ello es tan crucial que entendamos el valor de ponernos de acuerdo con Él. Que cedamos a Su voluntad.

La voluntad de Dios es buena, agradable y perfecta.

Caminar de acuerdo con Él garantiza a nuestra vida, protección, provisión y dirección entre otras cosas.

Dejémonos mover por Él. Permitámosle bendecirnos como quiere hacerlo.
Author: gabtorar
•11:38
Amós 3:3 ¿Andarán dos juntos si no estuvieren de acuerdo?

Cuando Dios planeó la creación todo fue de maravilla. Cada cosa que Él creó anduvo tal y como Él lo había determinado.

Lo vemos especialmente en la naturaleza que siempre ha caminando de acuerdo a la voluntad de Dios.

Los vientos, el sol, las estrellas, los cometas, los mares…¡¡TODO ELLO!!... se mueve de acuerdo al plan de Dios.

Pero luego tenemos la creación de Adán y Eva.

Mientras anduvieron en sujeción al Señor todo anduvo bien para ellos.

La enfermedad, debilidad, sufrimiento, temor, muerte no fueron tema para ellos HASTA que dejaron de andar DE ACUERDO con el Señor.

La vida desde entonces, se ha tenido que vivir bajo el prisma y con las reglas de un mundo caído.

El mundo tal y como Dios lo creó no incluía las tragedias que nos toca enfrentar. Ese es el submundo que resultó de apartarse de Dios, de dejar de andar DE ACUERDO con Él.

Es relevante preguntarse: “Mi vida ¿va de acuerdo con el Señor?

¿Sabías que las tragedias que vivimos usualmente son producto de no estar de acuerdo con Él?

Desde aquella persona que vive en las mejores condiciones hasta quien vive de la manera más básica, podemos aseverar que esa vida siempre podría ser mejor si se alineara con el Señor, si se pusiera de acuerdo con Él.

El texto fórmula una pregunta que a la vez revela una verdad: “dos no pueden andar juntos si no están de acuerdo”. Y esa es una poderosa verdad, es especialmente en lo concerniente a la vida espiritual.

Al mirar muchos de los acontecimientos que sobrecogen al mundo, como son las guerras, los asesinatos, la hambruna, los odios, la maldad, etcétera. Te das cuenta que estas cosas NO SON LO QUE DIOS DESEA.

Al pensar en lo anterior en cualquiera de las formas que se manifieste en lo cotidiano, tú te das cuenta que eso no es lo que Dios planeó, en otras palabras que eso no está de acuerdo con Él.

Quien genera tales circunstancias no es el Señor, son los hombres, son las personas que simplemente siguen el patrón de Adán y Eva de actuar EN DESACUERDO CON DIOS.

Mientras Adán hizo lo que Dios le pidió tu descubres que no tuvo que lidiar con enfermedades o sufrimientos. Estas cosas vinieron por actuar fuera de la esfera del Señor.

Por cierto, hay problemas contra los que nada podemos hacer. La muerte o la enfermedad escapan a nuestras manos, pero no a la autoridad de Cristo.

Sin embargo, hay otras muchas cosas domésticas y cotidianas sobre las cuales tenemos mucha injerencia.

Es en relación a esas cosas que necesitamos replantearnos y ponernos de acuerdo con Dios si no lo hemos estado haciendo.

Dios sabe que en el día a día enfrentamos variadas situaciones Él quiere ayudarnos en cada una de ellas, desea ser parte de lo que hacemos y vivimos, pero si no nos movemos en Él no habrá modo que Él pueda hacerse parte del asunto.

Dime si no es cierto que nos gusta hacer las cosas de acuerdo a nuestro parecer, y al estar en problemas intentamos involucrarlo a Él.

Desde luego esto es lo que suele suceder. Pero Dios no quiere tener un rol secundario en nuestro reparto, créeme que Él desea ser el protagonista.

Los dolores y sufrimientos terrenales por los que atravesamos (a excepción de aquellos ya descritos, como son la enfermedad y la muerte) en muchos casos pudieron haber ser sido evitados si hubiéramos prestado atención a la voluntad del Señor.

Él desea usar Su poderosa e inigualable influencia para llevarnos a una vida abundante con Él.

Pero Dios no es mágico. Él es definitivamente sobrenatural pero no mágico.

Quiero decir que Él no usa trucos para engañar. Dios siempre trabaja sobre la base de la realidad de cada uno y es por eso que necesitamos alinearnos nuestras vidas con SU voluntad.

Es entonces, bajo esas circunstancias que Él hace grandes cosas, aun milagros cuando si es necesario.

Pero Él entiende que dos no pueden andar juntos si no están de acuerdo.

Dios permita que lleguemos a entenderlo nosotros también.
Author: gabtorar
•11:37
Isaías 43:18: “NO os acordéis de las cosas pasadas, ni traigáis a memoria las cosas antiguas”.

Siguiendo con la idea de dejar ir ciertas cosas que nos amarran e impiden avanzar, me parece oportuno decir que muchas personas sacrifican su futuro por culpa de su pasado.

Me refiero a personas que vivieron malas experiencia en el pasado que las predisponen negativamente a nuevas experiencias del futuro.

La idea de “no me va a volver a pasar” es muy piadosa pero pienso que no volver a vivir ciertas malas experiencias no depende exclusivamente de nosotros.

Creo que debemos estar despiertos a lo que pasa alrededor siempre tanto como nos sea posible, pero aun haciendo esto, no podremos manejar todas las variables, incluyendo las reacciones o motivaciones que otros tienen para hacer lo que hacen.

De cualquier modo la vida es bella. Uno pasa por momentos duros a veces, es que la vida que tiene de dulce y agraz, pero sumando y restando suele ser más dulce que nada.

Por supuesto nuestra mentalidad es importante. Hay personas con una mentalidad tan negativa, que todo lo encuentra feo, malo, y nunca están contentas con nada. Esa clase de enfoque hacia la vida es muy nefasto.

Pero hay una gran mayoría (entre la que podemos estar incluidos nosotros) que han decidido cerrar las puertas a nuevas oportunidades después de haber vivido alguna desilusión.

Hay personas que cierran las puertas al amor por haber tenido una mala experiencia, una desilusión amorosa.

Otros, cierran las puertas a ciertos proyectos porque tuvieron malas experiencias en proyectos anteriores.

Otras personas cierran sus puertas a las congregaciones cristianas por haber tenido malas experiencias en alguna otra parte en este sentido.

Es comprensible que uno tome precauciones al enfrentar nuevas oportunidades pero bajo ningún punto o motivo será justo cerrarse a la posibilidad de nuevas oportunidades.

Dios desea restaurarnos y una nueva oportunidad es a veces la instancia que Dios usa para mostrarnos que no todas las experiencias terminan igual.

No sacrifiques el futuro que Dios quiere darte por culpa de alguna mala experiencia del pasado.

Date a ti mismo (y al Señor) la oportunidad de recibir aquello bueno que Dios preparó para ti.

No permitas que las marcas del pasado impidan al Señor hacer nuevas huellas en tu vida.

Es injusto meter todo en el mismo saco, no todas las personas son iguales, no todos los socios son iguales, no todas las congregaciones son iguales.

Darse la oportunidad es la mejor manera de comprobar que esto digo es verdad.

Cristo tuvo un Judas, un traidor junto a Él, pero también 11 buenos y leales discípulos.

Y a través de la historia ha tenido muchos, que como Judas le han traicionado, pero también a miles de otros que como esos apóstoles, han sido leales al punto de morir por su fe en Él.

Dios sabe que uno necesita siempre darse la oportunidad ¡y a sí mismo se la da!

¿No te parece sorprendente que Él siendo Dios haga esto?

Si Él lo hace así ¿que nos queda a nosotros?

Po tanto, querido lector, en lo que sea que se haya estancada tu vida por algo feo del pasado, suéltalo en este día, date la oportunidad (si estás vivo hoy es porque al menos Dios te la da) de empezar de nuevo, abre tu corazón y déjate guiar por la buena mano del Señor.

Esto traerá regocijo a tu alma.

En mi corazón me parece sentir la voz del Señor diciendo que habrá buen tiempo, que buenos días viene por delante.

¿Por qué desaprovecharlos por una tormenta del pasado?
Author: gabtorar
•11:34
2 Samuel 12: 21-22-23 “Y le dijeron sus siervos: ¿Qué es esto que has hecho? Por el niño, viviendo aún, ayunabas y llorabas; y muerto él, te levantaste y comiste pan. Y él respondió: Viviendo aún el niño, yo ayunaba y lloraba, diciendo: ¿Quién sabe si Dios tendrá compasión de mí, y vivirá el niño? Mas ahora que ha muerto, ¿para qué he de ayunar? ¿Podré yo hacerle volver? Yo voy a él, mas él no volverá a mí”.

En la vida indudablemente nos tocará atravesar por situaciones que dejarán huellas en nuestros corazones.

Cosas maravillosas que uno no olvida y que nos acompañan a través del tiemp0. Hay cosas bellas que hemos vivido y que resultan tremendamente reconfortantes para nuestra alma.

Pero también nos toca vivir cosas duras y dolorosas.

A veces en estas situaciones nuestra vida se estanca.

A estas situaciones bien podemos llamarlas CRISIS.

Una CRISIS puede definirse como un “cambio importante en el desarrollo de un suceso que da lugar a una inestabilidad”.

Otra definición es: “problema, conflicto, situación delicada”

Inevitablemente viviremos crisis en algún momento de la vida.

Pero esas crisis estarán allí para TRATAR ALGO en nosotros.

Las crisis nunca aparecen por que sí. Usualmente nos llevan a REPLANTEAR nuestro vivir.

Ellas nos hacen replantearnos en relación a nuestras decisiones, costumbres, proyectos…y mucho más.

Las crisis nos hacen DETERNOS PARA CONSIDERAR. ¡Eso es precisamente Replantearse!

Vemos que la situación del mundo está en crisis. Las naciones y sociedades en general están enfrentado serias crisis: violencia, alborotos.

Hay gran descontento. ¡¡La naturaleza misma está manifestando su descontento por la manera en que la tratamos!!

Las crisis que enfrenta el mundo secular son por causa de no considerar a Dios, por no querer hacerlo parte de sus planes y proyectos. Por no considerarlo en sus decisiones.

A propósito de replantearse, hay mucho que considerar en nuestras vidas y relaciones.

La vida agitada nos impulsa a actuar sin mucho análisis. Esto a su vez, nos lleva a tomar decisiones apresuradas, incorrectas y a meternos en problemas.

He dicho antes que hacer la voluntad de Dios a veces nos mete en problemas, pero casi siempre nuestras dificultades son por NO HACER la voluntad de Dios.

David, el rey de Israel, actuó alocadamente, actuó fuera de la voluntad de Dios y se metió en graves problemas.

Él se metió en una relación indebida. Se involucró con una mujer casada. Esto fue el comienzo de muchos problemas para él.

Es que podemos ver dónde comienza todo, pero nunca donde termina.

David siguió adelante con su vida aunque había equivocado el camino. Dios usó circunstancias para detenerlo y llevarlo “a considerar”.

Esa infortunada relación costó la vida a dos personas inocentes: el marido, llamado Urías y al bebé que se gestó como fruto de esa relación ilícita.

Por supuesto, para Dios el tema era bien relevante y lo puso en el tapete.

Nosotros evitamos tratar los temas relevantes. Pateamos esas cosa que nos incomodan tratando de evadir la responsabilidad de enfrentar el asunto.

Pero no hay plazo que no se cumpla y Dios dio SU perspectiva sobre el asunto (que es justamente lo que nosotros preferimos no escuchar) y a esa altura del partido Dios dictaminó juicio.

Ese bebé debía morir.

Una vez recibido el veredicto del Señor, David rogó, ayunó, quebrantó su corazón, buscó al Señor por una respuesta específica (en este sanidad para el bebé que enfermó).

Sin embargo, Dios cumplió su palabra (siempre lo hace) y el bebé murió.

Ocurrido esto, David se levantó de su estado penitente. Cambió sus ropas, se ungió y comió. En otras palabras ¡siguió adelante!

David hizo algo muy sabio. Él DEJÓ IR AL BEBÉ, para seguir adelante con el PLAN DIVINO.

No dejar ir ciertas cosas (o personas) se vuelve un verdadero obstáculo, una fortaleza que nos impide avanzar a la buena voluntad que Dios tiene para nosotros.

La pérdida de un ser amado, abandonar un sueño (proyecto personal), el quiebre de una relación, sufrir abusos (de cualquier índole), la frustración de no poder hacer lo que queríamos, etcétera, son cosas que nos detienen, nos AMARGAN la vida y Dios dice: “tienes que déjalo ir”.

Retenerlas, quedarse estancados en ellas, en la amargura, se convierte en una fortaleza que personalmente nos impide recibir la gracia de Dios y que contamina a otros.

Dios desea que demos un paso adelante, que nos levantemos para obedecer al Señor, para hacer Su voluntad.

Deja ir lo que tengas amarrado, o mejor dicho, lo que te esté amarrando.

Esas cosas ocupan lugar en tu corazón y necesitas hacer lugar para recibir lo que Dios preparó para ti.

Después de haber llorado la partida de ese ser tan amado. Con todo respeto, mi amado, debemos estar dispuestos a dejarlo ir, al hacerlo, la paz del Señor vendrá. Con SU bálsamo nos sanará.
Author: gabtorar
•11:34
Hechos 8:30 “Acudiendo Felipe, le oyó que leía al profeta Isaías, y dijo: Pero ¿entiendes lo que lees?”

La afirmación anterior puede ser molesta para alguno, pero no es mal que la verdad.

Indudablemente no soy la persona con más experiencia en Dios, pero tampoco el neófito más grande.

Llevo buscando al Señor bastante más de una década y hasta hace muy poco, Dios me ha hecho ver algo que yo todavía no veía: “llevo mucho tiempo leyendo la biblia, pero eso no es sinónimo de entenderla”.

El Señor me ha hecho ver que muchas de sus verdades han pasado delante de mis ojos (cuando leo Su Santo Libro) y yo ni siquiera lo he notado.

He oído de métodos que permiten leer toda la biblia en un año, pero ninguno que te permita ENTENDER profundamente al menos uno de los libros de la biblia, ni siquiera a lo largo de toda una vida.

He descubierto que uno de los factores que obstruyen el entendimiento de la palabra de Dios es nuestra mala lectura.

Para muchos esto es una terrible realidad: ¡¡Leemos muy mal!!

Y a veces esa es la razón por la que no entendemos lo que leemos.

Leer mal implica varias cosas. No hablo de la imposibilidad de juntar letras solamente, eso es en verdad trágico, sino de leer no respetando las pausas, o ignorando los contextos.

Creo que muchas veces hemos pecado haciendo decir a la biblia cosas que ella no quiere decir.

De ahí, no es muy difícil terminar frustrados por no poder entender la palabra de Dios.

Una de las cosas que más poderosamente ha capturado mi atención en este tiempo, es que no pocas veces, el Señor nos insta a usar lo que tenemos: “el que tiene oídos, oiga”, “esto es para la mente que tiene entendimiento”, o “aquí hay sabiduría”, y así otros más.

Dios dejó su palabra con la intención que entendamos. Puedes tener la seguridad que el Señor no está jugando a las adivinanzas.

Él desea que seamos llenos de Su conocimiento, Él desea que crezcamos en el conocimiento del Señor Jesucristo.

Él Padre desea que comprobemos su buena voluntad y esto no vendrá solo, la lectura juega un rol vital en este aspecto.

Está claro que leemos sin la adecuada aplicación.

Y ni mencionar que el paradigma que predomina en nosotros al leer la palabra de Dios es tremendamente determinante en el entendimiento que podamos tener de ella.

La palabra fue dada en oriente y esto, a nosotros, los pueblos de occidente, nos ocasiona serios problemas para entender ciertas cosas que son absolutamente ajenas a nuestra cultura, y realidad occidental.

Confundimos y mal interpretamos cosas, porque las vemos desde esta perspectiva occidental.

Es una gran verdad que para nosotros el mundo llega hasta Europa y ¿quién puede negar que la revelación bíblica vino desde más allá de ese continente?

Asimismo ¿quién podría negar que para entender cabalmente la palabra de Dios necesitamos estar al menos, ligeramente familiarizados con lo que pasa más allá de Europa?

Especialmente en lo concerniente a los sucesos finales y particularmente en lo referente a la intervención de Dios en favor de Su pueblo Israel ¿no está todo ello ligado al Medio Oriente?

Por nuestra mala lectura hemos equivocado nuestras interpretaciones y estamos dejando de lado a los principales actores, aquellos de los cuales la palabra de Dios habla con muchísima claridad.

Hoy más que nunca los libros de los profetas han cobrado un mayor sentido para mi vida.

Porque hoy, después de muchos años estoy entendiendo que necesito aprender a leer la biblia.

Que para entenderla, además de haber nacido de nuevo, es imprescindible leerla con los ojos correctos.

La voluntad de Dios desde el Génesis ha sido revelarse a nosotros su creaturas y la biblia, es la más sólida evidencia de ello.