Author: gabtorar
•14:44

Romanos 13:8 “No debáis a nadie nada, sino el amaros unos a otros; porque el que ama al prójimo, ha cumplido la ley”.

Se dicen muchas cosas acerca de Dios. Cada una de ellas por supuesto, deja de manifiesto la percepción o enfoque que cada uno tiene sobre Él.

Para algunos, Dios es un ser tiránico que goza viendo como los pobres mortales se las arreglan para evadir las mil y una dificultades que esta vida difícil les presenta.

Para otros, Dios es un ser muy bueno, lo que equivale a entenderlo como un tipo buena onda que tiene tan claro que somos débiles y dados a equivocarnos que usa de continua indulgencia para que podamos avanzar y ser felices, que hace vista gorda de nuestros múltiples errores y que esta siempre dispuesto a satisfacernos en nuestros caprichos y deseos.

Así hay muchas otras visiones de Dios y yo opino que si bien muchas se aproximan a lo que Dios es, ninguna le describe realmente de manera justa.

Pero ¿Cómo es Dios en realidad?

No espero (en este escrito) responder esa pregunta pero si quisiera decir algo que he aprendido sobre lo que Dios “no es”.

Dios NO es inconsecuente. Él siempre actúa en consecuencia con Su verdad, principios y palabra.

En las distintas visiones que las personas tenemos de Dios usualmente quedamos cortos para ver que Dios es en extremo consecuente.

Por alguna razón, el cristianismo actual ha cometido el grave error que propagar una “imagen” de Dios que no corresponde. En la mente de muchas personas existe la inexacta idea de un Dios indulgente, al cual pareciera no importarle conceptos como la responsabilidad o que nos hagamos cargo de nuestros actos.

Para muchos, Dios es tan bueno que no importa lo que hagamos, piensan que Él lo pasará por alto.

Creen que sin importar los problemas en los que nos metamos, Dios nos sacará sin costo alguno para nosotros.

¿Se ajusta realmente esa idea al carácter de Dios? Pienso que no.

Hay verdades potentes en la palabra de Dios. Una de ellas es que Dios le asigna valor a las cosas. Para Dios todo tiene su precio. Por increíble que parezca Dios es respetuoso del costo de la cosas.

En la vida nos encontramos con mucha gente que a su paso va dejando una estela de destrucción. Personas que donde quiera que pasan, dejan algún damnificado, alguna víctima de su egoísta manera de vivir sin considerar al resto, sin valorar al resto.

Dios es cualquier cosa menos un irresponsable. Él ama a las personas pero aborrece la irresponsabilidad con que actúan las personas, porque nuestros actos irresponsables siempre son fuente de mucha tristeza para “alguien”.

Hace un par de semanas el Señor me tocó profundamente con una verdad: Jesús PAGÓ EL PRECIO por nuestro rescate.

No solamente quiso rescatarnos, sino que pagó el legítimo precio exigido para tal rescate. Él, siendo Dios, no se deshizo de la muerte o del diablo para liberarnos de sus manos. Todo lo contrario, pagó el debido precio.

¡¡Qué gran ejemplo para nosotros de cómo se deben hacer las cosas!!

Él no pecó, pero sabiendo que la paga del pecado era la muerte, MURIÓ en nuestro lugar para pagar el precio por nuestra libertad (redención).

Dios se sujetó a las normas establecidas, se hizo responsable.

¿Somos responsables de los compromisos que asumimos?

¿Cuántos cristianos no tienen tan presente esta idea?

Cuando el Señor dice que “no debamos nada a nadie”, no sólo nos está invitando a no endeudarnos, sino también a cancelar las deudas que hayamos adquirido.

Esta es un área en la que tenemos mucho por hacer. Hemos llegado a confundir las cosas pensando que como Dios nos perdona, somos librados “de los costos” de nuestras acciones. Sin embargo, eso es algo absolutamente alejado de la realidad.

Dios nos ayudará toda vez que deseemos hacernos cargo de nuestros actos, pero Él no será indulgente, especialmente si ve en nosotros una reticencia a responsabilizarnos por compromisos que asumimos voluntaria y conscientemente.

|
This entry was posted on 14:44 and is filed under . You can follow any responses to this entry through the RSS 2.0 feed. You can leave a response, or trackback from your own site.