•16:03
Juan 11:39 Dijo Jesús: Quitad la piedra. Marta, la hermana del que había muerto, le dijo: Señor, hiede ya, porque es de cuatro días. 40 Jesús le dijo: ¿No te he dicho que si crees, verás la gloria de Dios?
La principal forma de conocer el mundo que nos rodea es por medio de los órganos de los sentidos que nos han sido dados. Contar con ellos es una gran bendi...ción de Dios. Es de hecho, un real privilegio. No todas las personas tienen la posibilidad de ver y oír, por ejemplo. Quienes ven y oyen tienen la posibilidad de recoger, por medio de estos importantes órganos, más información del mundo circundante que las personas que no poseen estas facultades.
No obstante, en lo que a la vida cristiana (espiritual) concierne, las cosas no son iguales. Estos mismos órganos que en la vida natural son tan importantes y beneficios pueden convertirse en poderosos obstáculos para la vida espiritual.
En lo natural, uno aprende a depender de lo que ve. A menudo las decisiones que tomamos dependen en gran medida del testimonio visual que tenemos. Así, uno escoge hacer o no hacer, ir o no ir, comprar o no comprar, comprometerse o no, en virtud de lo que SE VE. Contar con estos órganos, y usarlos debidamente, puede librarnos de grandes dificultades. Uno debe cuidarse con quién anda y en que se involucra,. En este sentido, la vista y el oído, ayudan mucho. Pero cuando se trata de los planes de Dios, debemos cuidar que lo que vemos y oímos, no nos detenga de hacer lo que Dios nos está encomendando.
Por lo general, Dios nos encomienda tareas que van más allá de nuestras propias capacidades. Son cosas que no se pueden lograr “a simple vista”. Se trata de tareas que demandarán la actuación explicita de Dios y Su poder, de Dios y Sus recursos. Y es en estos casos donde la vista nos suele jugar malas pasadas.
Son situaciones en las que uno NO VE como aquello podría llegar a suceder. Ocasiones en las cuales lo que vemos y oímos testifican que sencillamente aquello que Dios pretende NO ES POSIBLE (al menos, no para nosotros) y este testimonio visual y auditivo suele desanimarnos. Es como un balde de agua fría para la fe. Uno en fe LOGRA vislumbrar lo que el ojo natural NO PUEDE VER. Cosas escondidas al ojo humano, maravillas gloriosas que Dios ha reservado para los que le aman… y CREEN.
Cuando Jesús llegó a Betania, AMBAS hermanas de Lázaro dijeron que si Jesús hubiera estado allí, Lázaro no habría muerto. Y sabemos que Jesús SE QUEDÓ A PROPÓSITO lejos del lugar, para seguir con el plan de Dios, que era MUCHO MÁS glorioso que sólo sanarlo, Dios PLANEABA ¡¡levantarlo de los muertos!!
Marta dio crédito a lo que veían sus ojos: un fallecido de 4 día, en franco estado de descomposición, que ya expedía mal olor.
Ella, aunque veía a Jesús, no podía ver lo que Jesús veía. ¡¡Cómo necesitamos esto!! ¡¡Cuan indispensable es en este tiempo, poder ver lo que Dios ve. Y ÉL está, totalmente dispuesto a revelar!!
No le creas a tus ojos. Ellos no pueden ver lo que Dios es capaz de hacer por medio la fe.
Mientras escribo, acabo de recibir un testimonio (entre muchos) de una persona por la que oramos y que se está recuperando de manera inexplicable para los médicos, de una situación de extrema gravedad. ¡Aleluya!
Aunque la situación con tus hijos, cónyuge, economía o de cualquier tipo, vaya de mal en peor, debes saber, que el Dios que levantó a Lázaro, sigue teniendo el poder de resucitar aquello que hoy está muerto. NO creas a tus ojos. Cree a Dios, aférrate de ÉL en fe.
La principal forma de conocer el mundo que nos rodea es por medio de los órganos de los sentidos que nos han sido dados. Contar con ellos es una gran bendi...ción de Dios. Es de hecho, un real privilegio. No todas las personas tienen la posibilidad de ver y oír, por ejemplo. Quienes ven y oyen tienen la posibilidad de recoger, por medio de estos importantes órganos, más información del mundo circundante que las personas que no poseen estas facultades.
No obstante, en lo que a la vida cristiana (espiritual) concierne, las cosas no son iguales. Estos mismos órganos que en la vida natural son tan importantes y beneficios pueden convertirse en poderosos obstáculos para la vida espiritual.
En lo natural, uno aprende a depender de lo que ve. A menudo las decisiones que tomamos dependen en gran medida del testimonio visual que tenemos. Así, uno escoge hacer o no hacer, ir o no ir, comprar o no comprar, comprometerse o no, en virtud de lo que SE VE. Contar con estos órganos, y usarlos debidamente, puede librarnos de grandes dificultades. Uno debe cuidarse con quién anda y en que se involucra,. En este sentido, la vista y el oído, ayudan mucho. Pero cuando se trata de los planes de Dios, debemos cuidar que lo que vemos y oímos, no nos detenga de hacer lo que Dios nos está encomendando.
Por lo general, Dios nos encomienda tareas que van más allá de nuestras propias capacidades. Son cosas que no se pueden lograr “a simple vista”. Se trata de tareas que demandarán la actuación explicita de Dios y Su poder, de Dios y Sus recursos. Y es en estos casos donde la vista nos suele jugar malas pasadas.
Son situaciones en las que uno NO VE como aquello podría llegar a suceder. Ocasiones en las cuales lo que vemos y oímos testifican que sencillamente aquello que Dios pretende NO ES POSIBLE (al menos, no para nosotros) y este testimonio visual y auditivo suele desanimarnos. Es como un balde de agua fría para la fe. Uno en fe LOGRA vislumbrar lo que el ojo natural NO PUEDE VER. Cosas escondidas al ojo humano, maravillas gloriosas que Dios ha reservado para los que le aman… y CREEN.
Cuando Jesús llegó a Betania, AMBAS hermanas de Lázaro dijeron que si Jesús hubiera estado allí, Lázaro no habría muerto. Y sabemos que Jesús SE QUEDÓ A PROPÓSITO lejos del lugar, para seguir con el plan de Dios, que era MUCHO MÁS glorioso que sólo sanarlo, Dios PLANEABA ¡¡levantarlo de los muertos!!
Marta dio crédito a lo que veían sus ojos: un fallecido de 4 día, en franco estado de descomposición, que ya expedía mal olor.
Ella, aunque veía a Jesús, no podía ver lo que Jesús veía. ¡¡Cómo necesitamos esto!! ¡¡Cuan indispensable es en este tiempo, poder ver lo que Dios ve. Y ÉL está, totalmente dispuesto a revelar!!
No le creas a tus ojos. Ellos no pueden ver lo que Dios es capaz de hacer por medio la fe.
Mientras escribo, acabo de recibir un testimonio (entre muchos) de una persona por la que oramos y que se está recuperando de manera inexplicable para los médicos, de una situación de extrema gravedad. ¡Aleluya!
Aunque la situación con tus hijos, cónyuge, economía o de cualquier tipo, vaya de mal en peor, debes saber, que el Dios que levantó a Lázaro, sigue teniendo el poder de resucitar aquello que hoy está muerto. NO creas a tus ojos. Cree a Dios, aférrate de ÉL en fe.
1 comentarios:
hola les visito nuevamente desde mi blog, bendiciones.
www.creeenjesusyserassalvo.blogspot.com