Author: gabtorar
•6:51
Santiago 1:2 "Hermanos míos, tened por sumo gozo cuando os halléis en diversas pruebas"

A diario me encuentro con personas que cuentan con mucho entusiasmo que han conocido al Señor, que son ahora cristianos, que asisten a alguna congregación de manera estable y que están de una u otra forma comprometidos con las actividades de la iglesia.

Esto es fantástico, ideal, pero a medida que transcurren los minutos de conversación el gozo se empieza a desvanecer y da paso a las luchas y angustias o pruebas que tal hermano(a) está teniendo por causa de su fe, y lo que empezó con gran gozo termina de manera bastante lúgubre y con mucho lamento.

Es como si las dificultades nos tomaran por sorpresa, como si ellas no fueran parte de este Camino. Pero seamos justos y recordemos que el Señor prometió que enfrentaríamos pruebas, tribulaciones y persecusiones, de modo que cuando esto ocurre no debería tomarnos por sorpresa sino más bien afianzar nuestra fe en Aquel que todo lo sabe y que (¡¡bendito sea Su Nombre!!) también todo lo puede.

Me agrada servir a un Dios que no es tomado por sorpesa en los asuntos mas complcados de la vida. Me da gozo saber que Mi Dios tiene absoluto control sobre todas las circunstancias, que incluso aun cuando me pueda encontrar en diversas pruebas, Él sigue al mando del barco y el timón continua en Sus Manos.

Santiago escribe a los hermanos que esas pruebas deberían provocar en nosotros un especial gozo interior: "un Sumo Gozo".

La iglesia primitiva estaba llena de gozo, y también estaba llena de mártires, de persecusiones, de despojos, de ataques, de dificultades por dentro y por fuera, pero todas esas calamidades para ellos redundaban en un mayor gozo, en un sumo gozo.

Ellos se sentían gozoso de ser tenidos por dignos de padecer a causa de su fe en Jesucristo.

Si ese es el patrón de Dios ¿Qué pasa con nosotros entonces?

Por qúé no seguir más bien el modelo de aquellos primeros santos y gozarnos en medio de nuestras situaciones difíciles?

Quien escribe ha pasado por momentos complicados: mi esposa fue diagnosticada con cáncer al estómago e intervenida hace ya unos 5 años. Yo mismo fui intervenido quirúrgicamente a corazón abierto, hace 3 años (con apenas 33 años de edad)

Del primer embarazo de mi esposa, un embarazo gemelar, solo nació uno de los 2 bebés. Hemos pasado por el frio del invierno espiritual.

Hasta hoy compartimos (subarrendamos) un templo que pertenece a otra congregación porque no tenemos los recursos para adquirir (o alquilar) uno propio y no queremos que nuestro congregarnos se convierta en un tener que reunir dinero, porque entonces se pierde el verdadero objetivo del congregarse.

Las cosas anteriores no sólo no han logrado botarnos del Señor sino han producido en nosotros un mayor peso de gloria, una mayor confianza en Cristo, una mayor determinacion a confiar plenamente en Su Sabiduría y Soberanía, a entender que Nadie fuera de Él tiene el control de todo.

Yo no se mi amado hermano(a) qué puedas estar viviendo tú, pero si se, por experiencia, que nuestro Señor nos mandó a gozarnos, y no solo a gozarnos, sino a tener Sumo Gozo cuando estemos en diversas, porque la prueba de nuestra fe producirá en nosotros un fruto (y la voluntad de Dios es que llevemos mucho fruto y seamos asi sus discípulos) que la mayor prosperidad, riqueza o fama, jamás producirán.

Se bendecido por Dios. Aprendamos de Pablo a gozarnos y entendamos lo que realmente significa "todo lo puedo en Cristo que me fortalece"

El ángel dijo a Elías: ¡¡Arriba soldado del Señor, que largo camino te resta!!
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