Author: gabtorar
•6:05
Al mirar un rato la televisión nos vemos invadidos por cantidad de información que llega desde todas parte del mundo, lo que nos permite enterarnos de la realidad de otros con una rapidez que asombra.

Pero en la TV no todo es información. Gran parte de lo que se muestra es propaganda y la propaganda nos presenta un mundo fantástico que muchas veces nos hace soñar: "Si yo tuviera tal cosa...". "Si pudiera tener esto o aquello..." Y al final la vida se transforma en un "tener" que a veces va desde cosas muy útiles hasta cosas que no nos sirven para nada.

Pero la propaganda de alguna manera nos seduce y nosotros (la mayoría de nosotros) terminamos embriagados con ese licor llamado "consumismo".

Ahora bien, cuando existen los medios económicos para accecer a tales cosas, creo que esta bien acquirirlas (siempre que estas no se conviertan en un estorbo para nuestro plan en Dios). Después de todo, lo peligroso no es "tener cosas" sino que "las cosas nos tengan a nosotros". Y hay mucha gente que lamentablemente está cautiva por las cosas que tiene. Algunos están tan embobados con su nuevo auto, por ejemplo, que viven limpiándolo, "enchulándolo" y buscando siempre toda clase de accesorios que realce la belleza del vehículo. Otros tienen su corazón puesto en sus casa artesonadas (Hageo), siempre viviendo en función de cómo embellecer la casa.

El peligro está en hacer de esto un ídolo, un dios, no porque creamos que nos puede responder las oraciones, sino porque les dedicamos nuestro tiempo , pensamientos, devoción... ¡¡¡y recursos también!!

Concretamente (y este tema es muy apasionante) quiero que observemos en este día las palabras de Pablo "así que teniendo sustento y abrigo estemos contentos con esto" (1 Timoteo 6:8)

Hoy el sustento y el abrigo parecen nos ser suficientes para contentarnos y sufrimos, nos partimos el cerebro tratando de encontrar la forma de poder acceder a aquello (las cosas) que nos harán felices. ¡Que mentira! Si el contentamiento de algo nuevo dura apenas un par de horas y luego... se desvanece. Pero la carga de las deudas queda a veces por más tiempo del que quisiéramos.

Seguiré tocando este tema a la luz de la escritura pero por ahora sólo recordar que nuestro contentamiento no debe provenir de lo que tenemos sino de lo que somos, no de lo que algún dia podamos lograr sino de lo que Dios ha hecho por nosotros ESTE DIA.

Estoy seguro que en tu casa hay mas que sustento y abrigo. !!Dios siempre da más que lo que pedimos o esperamos¡¡

Pablo dijo que estas dos cossa bastaban para estar contentos. ¿¡No deberíamos estar rebozando de alegría!?

Un tema cristiano del hermano Steve Camp dice: "yo se que un día será libre, el peso del pecado será soltado de mi, pero por ahora (este dia) ÉL me cubre. ¡¡Gracias Señor!!
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